Parecía un local sin nada que avisase de que en interior se realizaba una actividad ilegal, pero la Policía Nacional adscrita a la Junta de Andalucía ha desmantelado una timba de póker que se desarrollaba en un local de Mairena del Aljarafe sin ningún tipo de permiso ni control legal del dinero que se manejaba en las apuestas, que, además, se movía en grandes cantidades.
Al acceder al local, los agentes encontraron, entre dinero en efectivo y fichas, 23.924 euros, así como todo lo necesario para desarrollar las partidas sin control legal alguno.
En sus redes sociales oficiales, la Policía ha informado de que los agentes accedieron al local cuando había nueve personas jugando, que manejaban 10.000 euros en efectivo y 789 en fichas para cambiar por dinero, que podían ser canjeadas por hasta 13.924 euros.
Identificados
Además, identificaron a dos organizaciones de las partidas, un crupier y comprobaron que había una barra de bar para dar ese servicio a los jugadores mientras se encontraban en el local.
Todo estaba perfectamente preparado tanto para jugar al póker clásico como al Texas Hold’em, este último con la base de dos cartas a las que se van sumando otras bien manejadas por el crupier. Para desarrollar este juego en concreto, la timba disponía de una mesa de juego profesional perfectamente instalada.
La Policía se incautó también de una mesa de póker profesional, diverso mobiliario y 17 bajaras de cartas diseñadas especialmente para este juego de naipes.
Las sanciones
La Ley de Juegos y Apuestas de Andalucía tipifica como «muy grave» la organización, práctica o celebración, gestión o explotación de juegos o apuestas sin poseer ninguna de las autorizaciones administrativas que reglamentaria y específicamente se establezcan para cada juego, así como el permitir o consentir, expresa o tácitamente, la celebración de estos juegos o actividades en locales o recintos no autorizados o mediante personas no autorizadas.
De hecho, las infracciones calificadas como muy graves serán sancionadas con multas de 10.001 euros hasta 300.000 euros; las graves, con multas de 601 euros a 10.000 euros, y leves, con multa de hasta 600 euros.
Además, cuando se aprecie fraude, la multa no podrá ser, en ningún caso, inferior al quíntuple de las cantidades defraudadas.
Indica la misma regulación que sin perjuicio de las sanciones que en su caso proceda imponer, podrán adoptarse como medidas provisionales la suspensión temporal de las autorizaciones o la clausura preventiva de los establecimientos públicos de juego o de apuestas cuando el procedimiento sancionador haya sido iniciado por la presunta comisión de infracciones graves o muy graves previstas en esta Ley.