El Conservatorio de Danza lleva al Parlamento las reclamaciones por la mejora de sus instalaciones

La comunidad educativa del Conservatorio Profesional de Danza Antonio Ruiz Soler de Sevilla, lleva años denunciando la situación en la que se encuentra su centro educativo. Desconchones, techos que se caen, aulas mal acondicionadas y con baches... Los alumnos del centro estudian y ensayan en condiciones llevan varios meses manifestándose. El jueves 16 de mayo se manifiestan nuevamente frente al Parlamento de Andalucía con el apoyo de los sindicatos de enseñanza con consignas y bailes por sevillanas.

Según AMPA, alumnado y profesorado, la situación es "límite". Su lucha empezó hace años cuando el centro, ubicado en los antiguos Pabellones de Argentina y Guatemala construidos para la Exposición Iberoamericana del 1929, no daban ya cabida a todo el alumnado. La solución fue llevarse a las Enseñanzas Básicas a un colegio a más de cinco kilómetros de dichas instalaciones, segregando dichas enseñanzas de las Enseñanzas Profesionales, lo que dificulta la relación y la coordinación entre alumnos y docentes.

Las instalaciones principales tienen numerosos problemas: falta de climatización, falta de insonorización y suelos inadecuados para la danza en algunas aulas, lo que provoca lesiones tanto en alumnado como docentes. A esto se le suma el peligro de desprendimiento de aleros y de numerosas grietas.

La situación en la que se encuentran las instalaciones han llevado a los alumnos del centro a convocar varias manifestaciones a las puertas del Pabellón de Argentina, donde reclamaban una mejora de la que consideran como su "casa". Los bailarines exigían "el arreglo de desperfectos" en suelos, cristales, barras, tuberías, insonorización y acondicionamiento de vestuarios y baños, entre otras cuestiones, y la "reubicación temporal en un edificio que cumpla" los requisitos para "el correcto desempeño de las funciones como conservatorio de danza".

Un centro que cubra las necesidades del alumnado

Los estudiantes reclaman desde 2008 un espacio mejor para poder formarse, en 2011 una inspección calificó su estado como desfavorable y en 2017, la hoy consejera de Desarrollo Educativo y FP, Patricia del Pozo, reclamó instalaciones nuevas. En 2020 debería haber pasado otra inspección, pero nunca se realizó. Ahora, Del Pozo, ha comunicado ciertos arreglos en el edificio para este 2024, pero los estudiantes subrayan que "estos son más parches a una situación insostenible, toda la comunidad educativa necesita un centro nuevo y digno para las enseñanzas de danza en Sevilla". "Parece que ya no se acuerda", han lamentado los alumnos del centro.

Las instalaciones no cubren las necesidades del alumnado. Tal y como denuncian, no se pueden asear correctamente por falta de instalaciones higiénicas, adolecen de comedor, no existe ni biblioteca, ni área de estudio y tienen numerosas barreras arquitectónicas, lo que dificulta su estancia en el conservatorio. Recientemente, se ha llevado a cabo en el edificio una Inspección técnica y ha sido desfavorable igual que la última que se realizó en el 2011.

Por último, denuncian también la falta de personal laboral en las instalaciones que añade inseguridad a la comunidad educativa. Por todas estas razones, familias, alumnado, sindicatos y profesorado van a seguir luchando por unas instalaciones dignas y porque la danza “no se muera” en nuestra ciudad.