MIGRACIONES

Sevilla Negra: una ruta para recuperar la memoria invisible de los siglos de la esclavitud

Hassam Sall es un joven guineano de 25 años, que ideó esta propuesta tras comenzar a leer sobre el pasado negro de la capital hispalense gracias a su profesor de español

Sevilla Negra es también una asociación formada por inmigrantes y afrodescendientes sevillanos que persigue conectar la historia de sus ancestros con la reciente

Un grupo de estudiantes de un curso de la Universidad de Sevilla en el el tour Sevilla Negra.

Un grupo de estudiantes de un curso de la Universidad de Sevilla en el el tour Sevilla Negra. / Ana Carretero

Ana Carretero

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Quien opte por esta ruta, no contemplará los monumentos más bellos y de mayor valor patrimonial de Sevilla. O sí, puesto que en las gradas de la Catedral era donde se vendía a los esclavos en los siglos XV y XVI, práctica que se extendió en la capital hispalense hasta el siglo XIX.

También se quedará muy sorprendido de que todavía existan vestigios de esa etapa en algunos rincones del callejero, como el símbolo con el que marcaban a los esclavos, en las traseras de la Iglesia de Los Terceros, o las esculturas de San Cosme y San Damián, en la Iglesia de la Anunciación, protagonistas de la leyenda del milagro de la pierna negra, que narra cómo trasplantaron a una persona blanca la extremidad de un africano.

De los barcos de negreros a los cayucos

Hassam Sall, el impulsor de este proyecto, es un joven de 25 años de Guinea-Conakry, emprendedor y activista que lleva cinco años en la ciudad y durante la ruta se declara bético entre bromas.

El día que El Correo de Andalucía se unió a su tour, asistió un grupo de unas quince personas, estudiantes de un curso sobre Migraciones y Salud Mental, de la asociación Mujeres en la otra Orilla para la Universidad de Sevilla, un buen número de ellos investigadores latinoamericanos y del Caribe afincados en Andalucía.

El punto de partida de la ruta Sevilla Negra en la Plaza de Cuba, donde llegaban los barcos negreros

El punto de partida de la ruta Sevilla Negra en la Plaza de Cuba, donde llegaban los barcos negreros / Ana Carretero

Lo más llamativo de la experiencia que propone la asociación Sevilla Negra es el paralelismo que realiza Hassam entre el periplo de los barcos negreros de África hacia España y Portugal, "sin vías legales y seguras para migrar" y su experiencia migratoria, porque él, explica, llegó en cayuco.

Hassam Sall, un guía activista que "lee, aprende y comparte"

El valor de la primera persona de un chico que, al comienzo de la actividad, advierte que no es historiador, pero "lee, aprende y comparte", y que no pudo inicialmente figurar en los registros de la asociación que imaginó y logró crear, porque estaban en situación administrativa irregular.

Este joven se desplaza por los puntos de esta ruta, diseñada por ellos mismos, inmigrantes y afrodescendientes sevillanos que trabajan para visibilizar la historia de los negros en la ciudad, señalando los lugares donde quizás algún día una placa conmemorativa repare la memoria de las víctimas de la esclavitud.

También, durante el trayecto, se acuerda de la imposibilidad de viajar de su hermana gemela, que se quedó en tierra, cuando explica el trato de las esclavas negras, madres del gran número de mestizos que poblaban la ciudad en aquel momento de la historia. "Quiero recuperar su memoria también por las mujeres de mi familia", asegura.

El ruta Sevilla Negra reta a través de una gynkana a los participantes a desentrañar la historia de la esclavitud en la ciudad en sus callejones y plazas.

El ruta Sevilla Negra reta a través de una gynkana a los participantes a desentrañar la historia de la esclavitud en la ciudad en sus callejones y plazas. / Ana Carretero

De Sevilla hablaban los historiadores como "el tablero de ajedrez" por la creciente población negra, que alcanzó el 14% del total de los habitantes de la capital en estos siglos.

Muchas de estas paradas, están relacionadas con lugares célebres de la novela picaresca de Cervantes, Rinconete y Cortadillo. Cuenta Hassam que fue su profesor de español el que le regaló el libro Los Invisibles. Hechos y cosas de los negros de Sevilla (Aconcagua, 2017) de Jesús Cosano, a él le sorprendió mucho conocer la historia de "sus hermanos", que no había tocado en las clases de historia de la educación de adultos. "Encontré algo mío, que merece la pena dar a conocer", explica.

De Sevilla hablaban los historiadores como "el tablero de ajedrez" por la creciente población negra, que alcanzó el 14% del total de los habitantes de la capital en estos siglos

La propuesta está pensada como una especie de gynkana. Los asistentes van contestando a preguntas en las distintas paradas: desde la Plaza de Cuba, en el monumento esférico que conmemora la hazaña de Magallanes, donde llegaban los barcos cargados de esclavos, y donde se tiraban los cadáveres de las personas que no resistieron el largo trayecto, hasta la Catedral, la Iglesia de La Anunciación,la Iglesia de Los Terceros, la calle Conde Negro, la Hermandad de Los Negritos, y la estatua de Antonio Machín, el negro caribeño más sevillano.

Detalle el mapa con las paradas del tour 'Sevilla Negra' que recupera la memoria del pasado esclavista en Sevilla

Detalle el mapa con las paradas del tour 'Sevilla Negra' que recupera la memoria del pasado esclavista en Sevilla / Ana Carretero

Del "sine eure" a los "sin papeles", cinco siglos después

Al final del itinerario, se detiene un tiempo a explicar qué significaba el símbolo de la "S" con el que marcaban a los esclavos. Sobre esto, Sall añade "conocer la historia, es la clave de luchar por nuestros derechos". "Las personas racializadas debemos conocer nuestra historia y reparar ese borrado histórico: ¿Por qué no hay una placa aquí que explique lo que ocurrió?", reflexiona.

Las personas racializadas debemos conocer nuestra historia y reparar ese borrado histórico: ¿Por qué no hay una placa aquí que explique lo que ocurrió?

Hassam Sall

— Sevilla Negra

Ese símbolo, que se herraba a fuego en la cara y en los cuellos de las personas, era una letra S atravesada por una I como si fuera un clavo: Es-clavo. La S de "sine" y la I de "iure", que traducido significa "sin derechos". A Hassam Sall esto le recuerda a la situación que viven los inmigrantes en situación irregular hoy: “Ahora somos sin papeles. No podemos trabajar, abrir una cuenta en el banco o alquilar un piso", subraya.

Hassam Sall acaba de conseguir su documentación tras llegar a Sevilla en patera hace cinco años.

El símbolo de la esclavitud con el que marcaban a las personas cuando los registraban como esclavos. / Ana Carretero

La ruta no tiene precio, aunque los miembros de Sevilla Negra piden una colaboración para avanzar en las acciones que lleva a cabo la asociación, con una media de edad de sus integrantes entre los 20 y los 25 años.

Estos emprendedores no paran de crear y a las actividades de apoyo educativo para inmigrantes, se unen los clubs de lectura, de cine, conciertos, charlas y, ahora, incluso han impulsado la ruta Cádiz Negra.