Sevilla, a la cola de las grandes ciudades españolas: “Si no hay más bibliotecas en Sevilla es porque el político no lo prioriza”

Julio, para algunos jóvenes, es un mes que significa estudiar. Sean segundas convocatorias o exámenes extraordinarios de cualquier índole, las bibliotecas experimentan uno de sus grandes picos de máxima afluencia.

Ante esta situación, la ciudad de Sevilla suspende en bibliotecas municipales en comparación con el resto de localidades españolas de sus mismas características. Tanto en cifra total como en promedio por habitante, superada por Valencia, Zaragoza, Murcia o Palma de Mallorca. La Red Municipal de Bibliotecas de Sevilla (RMBS), dependiente del Instituto de la Cultura y las Artes de Sevilla (ICAS), dispone de 14 bibliotecas repartidas por la capital sevillana para dar servicio a sus 697.233 habitantes (según el último dato conocido del padrón). Esto se traduce en un promedio de 49.801 habitantes por biblioteca, casi el doble del que tienen el resto de capitales del país con las que se puede comparar.

Dejando al margen a Madrid y Barcelona, que cuentan con unos condicionantes distintos de las demás ciudades, Valencia tiene un total de 32 bibliotecas municipales para sus cerca de 830.000 habitantes (casi 26.000 por biblioteca) y Zaragoza dispone de 26 bibliotecas y un kiosco para sus 682.000 habitantes (también en torno a una biblioteca por cada 26.000).

Mucho más por debajo en cuanto a población (pero con mejor promedio) se encuentran Málaga con 18 bibliotecas y un bibliobús para unos 587.000 habitantes (aproximadamente 32.600 habitantes por biblioteca); Murcia con 16 bibliotecas públicas, un centro de lectura y una biblioteca especializada para 469.100 habitantes (unos 26.000 por biblioteca); Palma de Mallorca dispone de 22 bibliotecas para aproximadamente 423.000 personas (en torno a 19.200 para cada biblioteca); o Las Palmas de Gran Canaria cuenta con 12 bibliotecas para sus cerca de 379.000 habitantes (un promedio de cerca de 31.500 por biblioteca).

Sevilla sí es la que más tiene en comparación con el resto de capitales de provincia de Andalucía, algo lógico como capital autonómica que es. Según las cifras oficiales consultables en las webs de cada ayuntamiento, Córdoba tiene 12 bibliotecas municipales, Granada cuenta con ocho, Huelva con siete, Cádiz y Almería poseen cuatro, y cierra Jaén con tres.

"El plan director previsto no se cumplió y no hay bibliotecas públicas en Nervión-San Pablo"

El mapa de la Red Municipal de Bibliotecas de Sevilla contiene 14 centros: Alberto Lista, Blas Infante, Cerro del Águila, El Esqueleto, Entreparques, Felipe González, Julia Uceda, Las Columnas, Los Carteros, Luis Cernuda, Parque Alcosa, San Jerónimo, San Julián y Torreblanca.

En una conversación con el director de la Red Municipal de Bibliotecas Públicas de Sevilla, Miguel Ángel Garfia, el funcionario explica el porqué no hay bibliotecas municipales en algunas de las zonas más residenciales de la ciudad.

“En su día se hizo un plan Director de bibliotecas en el que se especificaba la distribución de todas los centros de la ciudad, pero este no se cumplió y por ello no hay en Nervión-San Pablo.

Como se puede ver en la imagen, la distribución de las bibliotecas a lo largo y ancho de la ciudad muestra un reparto poco equitativo y un gran hueco sin ninguna entre las zonas de Nervión, San Pablo - Santa Justa o Cerro Amate. Una problemática reconocida por las propias instituciones responsables.

La Dirección General de Cultura de Sevilla, durante el mandato del anterior equipo de gobierno, con el PSOE y Antonio Muñoz como alcalde al frente, presentó en octubre de 2022 un Plan Estratégico 2023-2027 en el que se hablaba de "un gran vacío en la zona de Nervión-San Pablo".

"Aún quedarían muchas zonas para cubrir la vida cultural de toda nuestra sociedad sevillana" exponía el documento como conclusión general, y se centraba tanto en la zona del Este como en Nervión. En la primera, estudiar fuera de casa es una odisea, porque la biblioteca Blas Infante apenas tiene capacidad para 56 personas en un barrio de más de 60.000 habitantes. Paradójicamente, "son las que más préstamos anuales generan y las que mayor índice de participación tienen".

En el caso de Nervión y San Pablo - Santa Justa, "aunque no disponen de biblioteca en su zona, sí que reclaman este equipamiento, y se tienen que desplazar a las bibliotecas más cercanas para poder disfrutar de sus servicios y equipos". El único recurso que tienen estos vecinos son las diferentes facultades de la Universidad de Sevilla.

Por su parte, Garfia asegura que la no ampliación de la red es una “apuesta política”, insistiendo en que se ha aumentado la red de centros cívicos y, sin embargo, no hay más bibliotecas públicas. “El político decide dónde prioriza las inversiones y las actividades”, remarca el director de las bibliotecas públicas de Sevilla.

Además, Garfia subraya la importancia de invertir en personal, ya que de lo contrario, algunas universidades tienen que verse obligadas a cerrar algunas tardes al mes.

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Desde 2011 no se ha ampliado la red

El Plan Estratégico 2023-2027 presentaba la Red Municipal de Bibliotecas de Sevilla como "el principal servicio público dedicado a la cultura que más próximo se encuentra a la ciudadanía", ya que "todas las personas que habitan en el radio de acción de una biblioteca municipal pueden encontrar cultura inmediata, rápida y de calidad".

En el documento se consideraba necesario plantear un plan "ambicioso pero realista, cabal, fuerte y que apueste por la visibilidad de las bibliotecas en la ciudad". Además, se analizaba que desde que en 1991 arrancara la red, en una década se pasó a 11 bibliotecas y en 2011 se aumentó a las 14 definitivas.

El Plan Director de Bibliotecas de 2004 establecía la necesidad de haber construido desde ese año una biblioteca central, siete de zona y 22 de barrio

"Desde entonces se abre un periodo que nos debía haber llevado, aunque con una apertura gradual y más lenta de otras bibliotecas en barrios que aún no disponen de ellas, como Nervión-San Pablo, al menos a un fortalecimiento de la red existente, consolidando y ampliando el empleo, abriendo nuevos servicios e incrementando notablemente el presupuesto de mantenimiento, inversiones y programación cultural", continúa reflexionando el informe elaborado por la Dirección General de Cultura.

Se hace referencia a un Plan Director de Bibliotecas de 2004 "desfasado" pero que ya situaba en el horizonte la necesidad de haber construido desde ese año una biblioteca central, siete de zona y 22 de barrio. Pero el total sigue en esas 14 de barrio.

Cuando José Luis Sanz, el alcalde de Sevilla, todavía era candidato, presentó en campaña electoral su proyecto para ser "capital cultural del sur de Europa". Contemplaba 15 medidas en total, estando una de ellas dedicada a las bibliotecas. En concreto, el fortalecimiento de las bibliotecas de distritos y barrios.

Tanto el Gobierno local socialista como el popular eran y son conscientes de la necesidad de reforzar la red de bibliotecas municipales de Sevilla, pero sigue siendo una asignatura pendiente si se quiere estar a la altura del resto de ciudades españolas de dimensión y características parecidas.