Al menos 19 personas murieron y cerca de un centenar resultaron heridas por el derrumbe en Estambul de un edificio de oficinas tras una explosión en un taller ilegal de pirotecnia, informaron las autoridades turcas. Tres plantas del edificio de oficinas comerciales Prestij, de cinco pisos, situado en el distrito de Davutpasa, se vinieron abajo por la explosión, registrada a las diez de la mañana.
El gobernador de Estambul, Hilmi Guler, dijo que los muertos ascienden a 19, aunque se teme que dicha cifra puede aumentar por el estado crítico de cuatro de los heridos.
El número de heridos varía según las fuentes, pero de acuerdo con las últimas actualizaciones de los medios turcos se sitúa entre 74 y 117 personas. Guler señaló que las primeras investigaciones indican que el siniestro se desencadenó por una explosión inicial en un taller de fuegos artificiales sin licencia que hizo detonar una caldera de calefacción.
La empresa municipal de gas IGDAS explicó en un comunicado que la explosión no pudo deberse al gas ya que en el edificio donde se produjo no había canalizaciones de gas natural. El gobernador agregó que algunos de los fallecidos eran peatones que murieron por el impacto de los cascotes del derrumbe.
Los servicios de rescate han tomado medidas preventivas para evitar que se produzcan otras detonaciones en la zona por posibles fugas de gas, informaron los medios locales.
