Escoltado por más de un centenar de granaderos, el féretro del ex mandatario argentino partió de la sede del Gobierno, donde fue velado durante las últimas 26 horas, para cruzar las calles de Buenos Aires y llegar al aeroparque con el fin de ser trasladado a la sureña provincia de Santa Cruz. A pesar del fuerte viento y la intermitente lluvia, decenas de miles de personas protegidas con paraguas en las calles, al abrigo de la lluvia en balcones, portales e incluso encaramados a vallas y farolas se agolparon en las calles para despedir al desaparecido líder del peronismo con gritos de aliento hacia él y hacia su esposa y actual presidenta, Cristina Fernández.
Muchos de ellos se quedaron sin velar los restos de Kirchner en la Casa Rosada, sede del Ejecutivo, donde se instaló la capilla ardiente durante más de 26 horas. Una vez concluido el velatorio, al que asistieron la ministra de Asuntos Exteriores de España, Trinidad Jiménez, y el ex presidente del Gobierno español Felipe González, la comitiva fúnebre recorrió cinco kilómetros por emblemáticas avenidas porteñas, como 9 de Julio y Libertador, hasta llegar a Aeroparque, el aeropuerto de vuelos domésticos de la capital, a orillas del Río de la Plata.
La viuda del ex presidente Kirchner encabezó la caravana que acompañó al coche fúnebre y que se prolongó durante poco más de una hora en la que apenas cesó de lloviznar. En el aeropuerto, el féretro del ex presidente fue introducido en el avión que lo traslada a su ciudad natal, Río Gallegos, a unos 2.600 kilómetros al sur de Buenos Aires.
Tras la muerte del ex presidente argentino Néstor Kirchner, considerado el artífice del modelo económico impuesto tras la crisis de 2001-2002, los economistas no esperan un cambio de ese rumbo, aunque sí que pueden incorporarse algunos matices de estilo en su conducción. "La política económica argentina estuvo diseñada e influida con los diferentes ministros de Economía por Néstor Kirchner. Él estableció todas las líneas de un modelo de producción y trabajo", explicó ayer el economista Pablo Tigani.
Quien gobernó Argentina entre 2003 y 2007 logró sacar al país del duro golpe económico de la crisis que estalló a finales de 2001, tras cuatro años de recesión. Durante su mandato, la economía argentina creció a tasas promedio del 9% anual y ya, durante la gestión de su esposa desaceleró a un 7% en 2008 y a un 0,9% en un 2009 afectado por la crisis.
Tigani rescató elementos "inéditos" para la historia argentina que trajo el "modelo económico K", como el superávit fiscal y de cuenta corriente y la acumulación de reservas monetarias "para cancelar incluso deuda con los organismos multilaterales de crédito y poder así fijar las propias políticas económicas". "Esto se sostuvo en el tiempo hasta el día de hoy y sinceramente no creo que haya grandes cambios en la política económica", auguró.
