La recta final de febrero trae consigo dos choques especialmente exigentes para el Sevilla. En primer lugar, el Barcelona; y cuatro días después, el Atlético, con el pase a la final de Copa en juego. Ni que decir tiene la trascendencia que para club, equipo y afición tendría dar ese paso que, además de permitir luchar por un título, garantizaría virtualmente la clasificación para la Europa League. Por ello, surge una pregunta: ¿debe alinear Unai Emery a sus mejores hombres en el Camp Nou o, por el contrario, reservarles para el decisivo duelo de Copa?
Hasta la fecha, el técnico vasco ha alineado siempre a su once de gala; con alguna modificación puntual pero siempre a los mejores. Y ello pese a la acumulación de partidos (Liga y Copa) que deparó el mes de enero y el consiguiente escaso tiempo para descansar. Por si esto fuera poco, los internacionales han tenido menos respiro incluso. Fuerzas no sobran. Con este panorama, la alineación que presentará el Sevilla este sábado en el Camp Nou es una incógnita.
La titularidad de Beto parece segura, toda vez que Palop sigue recuperándose de su lesión y que el portugués está rindiendo a un alto nivel, tras meses de incertidumbre en la portería. En defensa, Spahic no podrá jugar por acumulación de amonestaciones. Salvo que el club presente alegaciones y éstas prosperen, Botía será el acompañante de Fazio en el eje. Fernando Navarro, baja en Copa por sanción, ocupará el flanco izquierdo y Coke, salvo que Cicinho llegue a tiempo y con un buen nivel tras su lesión, será el lateral derecho.
Más dudas hay en el centro del campo y en ataque. Kondogbia está pendiente de evolución y podría dejar su plaza. El francés es uno de los jugadores más en forma del equipo y su concurso ante el Atlético se antoja importante. Como el de Gary Medel, otra pieza clave que lo juega todo y al que no vendría mal un respiro. Maduro, baja ante el Deportivo por sanción, estará disponible, al igual que Javi Hervás. Campaña, en cambio, anda lesionado.
En la derecha, la condición física de Jesús Navas es tan privilegiada que resulta difícil ver a un técnico darle descanso. Sí podría tenerlo Reyes, otro jugador con mucho que decir en la vuelta de semifinales. Su calidad y frescura pueden ayudar de forma decisiva. Justo lo mismo que sucede en los casos de Rakitic y Negredo, dos piezas absolutamente vitales. Manu y Babá, más frescos, deberían tener minutos el sábado.
Ganar con los menos habituales es difícil, pero... ¿sería más fácil vencer a este Barça con los mejores? En cualquier caso, el equipo azulgrana también puede rotar, ya que, tras visitar al Milan y jugar contra el Sevilla, recibirá al Real Madrid (martes 26).
