Trinidad Jiménez frente Tomás Gómez. Finalmente ése será el cartel -tal y como se esperaba- de las primarias del próximo 3 de octubre que designará al candidato socialista en la Comunidad de Madrid para 2011. El paso ayer al frente de Jiménez supone también el inicio de una batalla en el PSOE para recuperar Madrid 16 años después.
La ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, anunció ayer minutos después de las 9.30 horas su "decisión personal" de enfrentarse al secretario general del PSM, Tomás Gómez, en unas primarias para encabezar la lista de su partido a las elecciones autonómicas de mayo de 2011 en la Comunidad de Madrid. Jiménez se incorporó ayer a su despacho tras unas breves vacaciones y, en declaraciones a los periodistas, señaló que había hablado por la mañana con Gómez para comunicarle su decisión y que quedaron en "que gane el mejor".
"La decisión la tomo yo. Hoy me presento yo", aclaró Jiménez al ser preguntada sobre si es la candidata promovida por el presidente del Gobierno y líder del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero. Y sostuvo que éste no le ha pedido nada. También aseveró que optó por presentarse a las primarias, que se celebrarán el 3 de octubre, "por los madrileños y por los militantes socialistas".
Tras juzgar que Gómez "lo tiene más fácil" que ella en las primarias, porque "para eso es el líder del partido", precisó que, no obstante, en lo que nadie la va a vencer es en las "ganas de presentar un proyecto ilusionante". "En ganas sí que me considero una buena candidata", apostilló.
Convencida de que "es hora de presentar un proyecto que ilusione a los madrileños" y de que ella está en condiciones de encabezarlo, la que fuera candidata del PSOE a la Alcaldía de Madrid en el año 2003 elogió a Tomás Gómez y su trabajo en estos tres años al frente del PSM. Gómez, de acuerdo con las palabras de la ministra, es "un gran líder" y "un gran político", una persona a la que tiene "un gran afecto personal".
Más parco en palabras fue su rival. El secretario general del Partido Socialista de Madrid (PSM) llegó a su despacho pasadas las nueve y media de la mañana, sin hacer declaraciones, casi a la misma hora en que Trinidad Jiménez anunciaba su decisión de competir con él por la candidatura a la Comunidad de Madrid. Tomás Gómez se limitó a responder con un "muchas gracias" a los periodistas que esperaban.
Quienes sí hablaron fueron los colaboradores de ambos dirigentes y para reclamar lo mismo: neutralidad. Así la portavoz socialista en la Asamblea de Madrid, Maru Menéndez, dijo ayer que espera y confía "en una neutralidad absoluta de Ferraz -sede nacional del PSOE- para las primarias". La también secretaria de Política Autonómica de la Ejecutiva del PSM que dirige Tomás Gómez expresó además su "respeto" para su "compañera" Trinidad Jiménez. A Maru Fernández le respondió la secretaria de Política Internacional y Cooperación del PSOE y diputada en el Congreso de los Diputados, Elena Valenciano, quien garantizó que la Dirección Federal del PSOE va a mantener una "neutralidad exquisita" en las elecciones primarias y exigió al PSM que mantenga la misma actitud. En declaraciones a la Cadena SER recogidas por Europa Press, Valenciano anunció que la Dirección Federal del PSOE "no va a usar ninguno de los instrumentos que tiene a su alcance para presionar en un sentido u en otro", lo mismo que, en su opinión, debe hacer "la Dirección Regional del partido en Madrid, cuyo secretario general es el candidato a estas elecciones".
El PP también tomó la palabra. Cuando apenas habían transcurridos tres horas del anuncio de Jiménez, el vicesecretario de comunicación del PP, Esteban González Pons, pidió la dimisión como ministra de Sanidad porque, en su opinión, debe optar "entre esta responsabilidad o bien dedicarse a otros temas ajenos". Según González Pons, el Ministerio de Sanidad exige "suficiente trabajo, esfuerzo y dedicación". Una petición que desoyó la propia Jiménez, ya que, según ello, no hay ninguna incompatibilidad en seguir de ministra y optar a ser candidata por Madrid en las autonómicas de 2011.
