Bankia logró ayer sobreponerse a la montaña rusa que vivió la cotización de sus acciones desde que, a partir de las doce de la mañana, hicieran su debut en el parqué madrileño. Sus títulos capearon la "tormenta perfecta" de los mercados y cerraron su primera sesión en bolsa a 3,75 euros por título, el mismo precio al que se estrenaron, tras llegar a caer más de un 6% en las primeras horas de negociación.
Las acciones del banco del grupo que lideran Caja Madrid y Bancaja marcaron su precio más bajo en 3,510 euros, tras registrar un primer cambio de 3,68 euros por acción en su desembarco en el parqué, un 1,86% inferior al precio estimado de salida, y sellaron la jornada en tablas.
Bankia se desmarcó de la evolución del resto de valores bancarios, que se dispararon al calor de las esperanzas de los inversores sobre un acuerdo que permita allanar finalmente el segundo rescate de Grecia en la reunión del Eurogrupo de hoy, con lo que tampoco pudo sumarse a la fiesta del Íbex, que se anotó la segunda mayor subida del año, tras revalorizarse un 3,06%.
El selectivo se vio espoleado por el espectacular empuje del Santander (5,05%) y de BBVA (4,36%), a la espera de que la cumbre europea dé a luz medidas que ayuden a rebajar la prima de riesgo de España y aleje el fantasma del contagio de la crisis de deuda.
Hoy la atención estará centrada en el estreno en bolsa de Banca Cívica , liderada por Cajasol. Su estreno estará inevitablemente marcado por los resultados de la cumbre europea y su disposición para despejar las dudas sobre el segundo rescate griego, en un momento de extremada sensibilidad en los mercados por el contagio de la crisis de deuda a países como Italia o España. 2,7 euros es el precio elegido para el debut bursátil, la banda más baja de la horquilla, para que un precio atractivo sirva de reclamo a los inversores.
El consejero andaluz de Economía, Antonio Ávila, confió en que "con los ratios manejados por el consejo de administración" de Banca Cívica, la emisión "tendrá respuesta cumplida y la entidad podrá capitalizarse en los próximos días sin problemas".
Ajenas a la euforia de los pesos pesados, las acciones de Bankia terminaron planas tras un estreno agitado. Los títulos aminoraron el descenso que describieron en la primera media hora de negociación tras un elevado volumen de órdenes de JP Morgan y otros brókeres de Bankia, que sumaban el 24% del capital en bolsa a las 14.00 horas.
El presidente de Bankia, Rodrigo Rato, reconoció en su discurso tras el tradicional toque de campana de bienvenida en la Bolsa de Madrid que los mercados atraviesan grandes turbulencias que tildó de "tormenta perfecta", a lo que se suma la actual aversión de los inversores a la renta variable en general y a los valores financieros en particular.
Las ganancias en eficiencia, la reducción de costes y eliminación de oficinas redundantes, junto a la gestión de su equipo directivo y los trabajadores, son algunas de las bazas que prevé emplear Rato con el objetivo de crear valor para el accionista.
El director de Estrategia de Citi en España, José Luis Martínez, consideró que terminar en tablas en el estreno tras haber llegado a caer un 6% "es una buena noticia" en el actual escenario de acusada volatilidad en los mercados y de recelo a valores bancarios de nueva creación.
Martínez sostuvo que la evolución de Bankia en los próximos días puede registrar variaciones que pueden vincularse tanto a la inestabilidad de los mercados como al ajuste de las carteras de los inversores, por lo que su comportamiento a corto plazo no se puede extrapolar para el futuro.
Por el contrario, el experto de IG Markets, Daniel Pingarrón, considera que "la salida a bolsa de Bankia es bastante mala" en un día en que el Íbex se anotó una importante subida gracias a la mejora de los indicadores de deuda, que permiten aminorar los temores de impago de los inversores. De hecho, la prima de riesgo española marcaba 330 puntos básicos al cierre de la sesión.
Para Pingarrón este debut es "una mala señal para Bankia" que no permite ser muy optimista sobre la evolución del valor. No obstante, matizó que el primer día de cotización suele ser "extraño" y no tiene por qué convertirse en referente para el comportamiento futuro. A su parecer, el destino de Bankia a medio plazo está asociado al del riesgo país, como el del resto de bancos cotizados españoles, por lo que resulta "sorprendente" que en su estreno no se haya aprovechado de la carrera emprendida por los valores bancarios.
La responsable de análisis de Selfbank, Victoria Torre, resaltó que la banca viene de un castigo importante en su cotización y que los inversores prefieren decantarse por entidades como el Santander, que conservan un potencial de revalorización del 30%.
