El primer ministro belga, Yves Leterme, admitió ayer que las autoridades del país sopesaron suspender el Consejo Europeo que reunió el jueves y ayer a los líderes de la UE en Bruselas, tras la detención de 14 presuntos miembros de Al Qaeda, pero que dijo finalmente no fue necesario.
En declaraciones a los medios a su llegada al segundo día de reunión de los jefes de Estado y de Gobierno europeos, Leterme explicó que la suspensión de la cumbre "fue una hipótesis que estuvo sobre la mesa" el jueves, pero "en ningún momento ha sido necesario". "Si después de todo, sin haber tomado las medidas de prevención, hubiera habido un atentado con bomba o algún desastre, la gente hubiera dicho que no se había hecho todo lo necesario para evitarlo", añadió Leterme.
La Policía belga detuvo el jueves a 14 presuntos miembros de la red terrorista Al Qaeda, uno de los cuales ya estaba aparentemente listo para cometer un atentado. Cuatro de ellos, de nacionalidad belga, habrían mantenido contactos con un supuesto agente de enlace con la red terrorista en Afganistán y Pakistán desde finales de 2007.
A pesar de que las autoridades no pudieron concretar si el objetivo del posible atentado era algún país europeo o no, la presencia de los mandatarios europeos en Bruselas a partir de la tarde del jueves precipitó las detenciones de los sospechosos.
