José Anselmo Moreno
España alcanza las semifinales, donde finalmente se medirá a Islandia, tras derrotar a Corea del Sur (24-29) en un partido que se resolvió en la segunda mitad desde la portería española. La otra semifinal medirá a Francia con Croacia.
Los españoles fueron otra cosa en defensa, aunque también tenían enfrente a un rival menos potente y más fácil de sujetar. No obstante, el partido transcurría igualado, pero dos exclusiones absurdas dieron aire a Corea.
Los de Corea del Sur corren, fintan, esquivan dificultades y nunca se rinden. Su bravura les convierte en una china en el zapato y la china se transfiguró en piedra a medida que avanzaba la primera parte, ya que España no conseguía imponer lejanía alguna en el electrónico.
Los empates se sucedían. Corea hacía sus goles sin recurrir a uno de sus mejores jugadores, el central del Hamburgo Kyungshin Yoon. Sin embargo, el lateral izquierdo Paek fue un martillo para España que no puso más que un gol de por medio en esta fase. 13-14 al descanso.
Tampoco en la segunda parte se despegaba nadie. Todo fue así hasta el minuto 39, cuando los españoles se pusieron 17-19. Ese era el momento clave, el de romper el partido ante el hundimiento defensivo del rival.
Los de Pastor se pusieron cuatro arriba de la mano de un gran Rocas (17-21, m. 42). España mantenía sólida su defensa, sin exclusiones. También David Barrufet se agigantó, y de qué manera, en la portería. De esta forma, los coreanos comenzaron a desinflarse y se atascaron en 17 goles durante más de diez minutos. Nada fue igual que en el primer tiempo, así que la victoria española acabó siendo mucho más tajante de lo previsto.
