Las altas temperaturas registradas estos días en España son "anómalas" para la época del año, aunque no han batido récords, según explicó hoy a Europa Press el jefe del servicio nacional de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET ), Angel Alcazar, que anunció que el mercurio descenderá a grados más propios del otoño a partir de la próxima semana.
En este sentido, señaló que llegarán las nubes y la disminución de los termómetros será progresiva cuanto más al sur, y por el contrario, más drástica cuanto más al norte.
"La situación anticiclónica es la que hace que haya estas altas temperaturas. Ya ha ocurrido más veces. En 2006, por ejemplo, un día como hoy se superaron los treinta grados. El problema es compararlo con el año pasado, que fue bastante frío y húmedo, y hubo hasta nieves en algunas zonas", comentó.
En referencia a si esta situación puede tener alguna relación con el cambio climático, Alcázar explicó que estos fenómenos "son tendencias de más largo plazo", y que en lo que va de mes de octubre, simplemente se está sucediendo una situación estable de temperaturas altas.
En este sentido, puntualizó que no durará mucho más y concretó que a partir del lunes bajarán las temperaturas, de forma que al finalizar la próxima semana ya se estará propiamente en otoño. "Por ejemplo, en el caso del norte llegarán ya nubes incluso el domingo. En Oviedo de domingo a lunes, las temperaturas estarán ligeramente por encima de los 20 y el lunes caerían a los 15 y seguirían bajando a lo largo de la semana, en torno a uno ó dos grados diarios", añadió.
Además, destacó el caso de Madrid, donde los termómetros bajarán en torno a tres grados el lunes y otros tres el martes, y después dos tanto el miércoles como el jueves.
En cuanto a este fin de semana, Alcázar pronosticó que ya el domingo entrará nubosidad por Galicia y Cantábrico y a partir del lunes se generalizarán en el tercio norte, con precipitaciones y bajada de temperaturas "bastante significativa", especialmente el lunes. "El miércoles llegará a Levante", puntualizó.
"Todavía es un poco pronto para hablar de nevadas pero en las zonas más altas la cota de nieve se situará por debajo de los dos mil metros en Pirineos y Picos de Europa, en torno a los 1.700 metros, por lo que probablemente nevará", concluyó.
