El consejero delegado del Real Betis sigue trabajando como si no fuera a vender el club y se decanta, por lo que dejan caer los medios del club, por la oferta que garantizaría su continuidad en el consejo de administración.
Cuanto más se habla de un futuro del Betis sin Lopera, más se parece el todavía consejero delegado al que cautivó a su gente con fichajes de campanillas, inversión elevada y, por tanto, aspiraciones superiores.
La gestión de Lopera al frente de una SAD no deja de ser más que cuestionable, pero el magnate del Fontanal se ha redescubierto y parece dispuesto a hacer lo que le convirtió en el indiscutible líder de su particular Betis: invertir en lo que le pide un técnico de garantías, en este caso Paco Chaparro.
Más que nunca Lopera se parece al que fue en su primera etapa cuando ayer por la mañana, antes de acudir a una sesión médica para aliviar sus problemas con las cervicales, atendía brevemente al retén de periodistas que cada verano pasan horas y horas en esa famosa calle Jabugo.
Hace ya muchos años, el mismo Lopera relataba como tuvo que abrir un banco para cerrar la operación de Finidi y cómo comentaba que para quitarle a ése u a otro jugador, el equipo que lo quisiera (Real Madrid) tendría que cerrar ese banco u otro.
En esta ocasión, la directora de una sucursal con la que Lopera trabaja desde hace años se tuvo que pasar fuera de horario de oficina por el despacho de Lopera en la tarde del miércoles para certificar la transferencia que exigía el Toulouse para dar por zanjada la larga contratación de Achille Emana. El propio Lopera lo explicaba.
"Se negocia por algunos y se quiere dar salida a varios jugadores lo que pasa es que nosotros tenemos que pagar por todos, como con Emana, que vinieron los del Toulouse y tuve que abrir el banco por la tarde para hacerles una transferencia, y cuando llegan por futbolistas nuestros se los quieren llevar gratis. Hasta doce clubes nos han pedido jugadores, pero todos quieren que vayan de balde y eso no puede ser", decía Lopera.
Nunca fue fácil colocar a los descartes y mucho menos fichar a jugadores cotizados. En ese último caso se sitúa Chrétien, el lateral del Nancy, como reconoce Lopera. "Se está negociando por ese jugador y por otros", señaló.
Paco Chaparro, ciertamente sorprendido por la inversión ya hecha por Lopera y, sobre todo, por lo que pueda venir, pedía públicamente que el consejero delegado se quedara hasta hacer campeón al Betis. "Si somos campeones entonces no me voy nunca", dijo.
Y eso es lo que parece que puede pasar, porque a través de los medios oficiales del club, se evidencia muy claramente la preferencia de Lopera su es que se decide a vender el famoso paquete de Farusa que reúne el 53% de las acciones del Betis. Se comenta en una información que aparece en la web que el "grupo B", unos desconocidos empresarios dispuestos a realizar en firme una oferta que superaría la de Castel y que vendrían haciendo menos ruido que Castel, están "decantando la balanza" en su favor en el orden de preferencias de Lopera a la hora de vender.
Se deja muy claro que además, el "grupo B", quiere contar con Lopera como consejero, por su capacidad de gestión, algo que le ha gustado a Lopera y que no se contempla en la oferta de Luis Castel.
