El célebre informe Molina, elaborado por el Consejo de Román en 2007, ya señalaba al Martes como día propicio para la inclusión de alguna hermandad. Ahora que la Archicofradía de La Misión ha puesto sus ojos en él, los hermanos mayores del día -salvo excepciones- cierran filas.
Hasta el propio delegado de día, Francisco Javier Gómez, ve "muy complicada" la incorporación de una nueva hermandad hasta que el día no resuelva los problemas crónicos que viene arrastrando, "salvo que nos la impongan". "El Martes -dice- no está como para plantearse siquiera esa posibilidad, sobre todo teniendo en cuenta que hay quien quiere sacar un tercer paso". Sólo las cofradías más tempraneras de la jornada abren la puerta a esa posibilidad. En el Cerro, Adolfo López, se muestra "encantado", aunque expresa sus dudas sobre si La Misión, por sus características, sería la más idónea, al tratarse de una cofradía de largo recorrido y con previsión de crecer en poco tiempo. Jesús Gutiérrez, de Los Javieres, se muestra dispuesto a estudiar la incorporación, si bien asegura que es "complicado". "Si no somos capaces de organizarnos con ocho hermandades...", espeta. El comisionado de San Esteban rehúye cualquier valoración y en Los Estudiantes ven como principal inconveniente su lejanía del centro. Manuel Bermudo, de San Benito, no vería inconveniente si así lo aprobara el pleno de hermanos mayores, pero echa balones fuera y señala a días "más descargados", como el Viernes. En La Candelaria apuestan primero por solucionar los problemas del día. El Dulce Nombre no le niega el derecho a nadie, "pero siempre detrás de Santa Cruz", y la decana cree que el Martes es el día menos indicado.
