El temporal de los últimos días en el Estrecho ha acelerado el hundimiento del buque chatarrero 'New Flame', encallado en estas aguas desde agosto, y ha provocado nuevas fugas de hidrocarburos que cubren más de un kilómetro de la costa algecireña, principalmente en la playa de La Concha y en las proximidades de la de Getares.
Sólo parte de la chimenea y el mástil de popa del buque sobresalen del agua, según Salvamento Marítimo de Algeciras y Verdemar-Ecologistas en Acción, cuyo portavoz, Antonio Muñoz, estima que, dado que la profundidad del agua ronda los 27 metros, el New Flame debe haber tocado fondo.
El diputado socialista por Cádiz, Salvador de la Encina, confirmó que "la popa del barco se ha hundido", lo que ha provocado nuevos vertidos. Sin embargo, el Gobierno de Gibraltar restó importancia a la situación y aseguró que sólo se ha "hundido un poco la parte trasera del buque" pero con el temporal el barco "ha perdido flotabilidad", por lo que sólo se ve la parte superior. Asimismo, negó que se haya producido "contaminación alguna" aunque reconoció que "hay pequeñas manchas de hidrocarburos en algunos equipos".
La Concha es una de las playas más afectadas, ya que se encuentra en la zona en la que abate el viento cuando sopla un fuerte levante, como ayer, si bien las manchas se aproximaron a la de Getares, según el PSOE y Ecologistas en Acción.
La Subdelegación del Gobierno en el Campo de Gibraltar activó un Plan Territorial de Emergencia en Algeciras para limpiar las playas con 28 técnicos de la empresa Tragsa -dependiente de la Dirección General de Costas de Egmasa- y trabajadores municipales. Según fuentes de la Subdelegación, el agua, mar adentro, parece limpia. Por su parte, De la Encina anunció que el Ministerio de Fomento prepara un dispositivo especial de intervención marítima que actuará "cuando la climatología lo permita".
Ecologistas en Acción denunció que la compañía Titan Savage, encargada del rescate sólo dejó un remolcador sujetando el New Flame, un barco que "no tiene consistencia para sujetar al chatarrero y la corriente se lo ha llevado con el temporal". Gibraltar afirmó que la empresa tomó "medidas para prevenir incidente antes de la tormenta" consistentes en colocar piedras pesadas para evitar que el barco, que quedó en posición vertical, acabara en el fondo, del mar. Los técnicos de Titan esperan que el temporal amaine para conocer el estado en que se encuentra el buque.
