El segundo avión de transporte militar de la familia A400M despegó ayer por primera vez desde las pistas del aeropuerto sevillano de San Pablo, localizado muy próximo a la planta donde se ensamblan estos aviones y el resto de la familia de productos propios de la antigua CASA.
La aeronave levantó el vuelo, en lo que se convirtió en su estreno aéreo, a las 15.15 horas, según confirmaron fuentes de Airbus Military, que promueve la fabricación de este aparato.
Se trata del segundo avión que formará parte del equipo de cinco que desarrollarán el programa de ensayos en vuelo para la certificación de la aeronave, que sumará 3.700 horas de vuelo.
En la última semana de diciembre pasado -justo unos días después de que el primer A400M culminara uno de sus hitos con el primer vuelo también desde Sevilla el día 11 de ese mismo mes-, el avión que ayer alzó el vuelo salió del hangar de montaje rumbo al de pintura.
El tiempo de vuelo de este segundo avión se prolongó durante algo más de cuatro horas y media -aterrizó con éxito en el aeródromo hispalense, según comentaron testigos presenciales- y a bordo se realizaron distintas pruebas, al igual que ocurrió con el primero.
El primer avión, también conocido como MSN1, se encuentra en la localidad francesa de Toulouse desde el 9 de marzo, donde está siendo sometido a ensayos. De todas formas, y a pesar de que hay dos aviones de pruebas que tendrán su base en Sevilla y tres en Toulouse, lo cierto es que los aviones irán viajando de un punto a otro en función del desarrollo de las pruebas y de las necesidades del momento.
Facilita esa cuestión el hecho de que los ensayos en vuelo se pueden seguir en tiempo real tanto desde la capital hispalense como desde la ciudad francesa, explicaron las fuentes de EADS.
Este enero arrancó la construcción del cuarto prototipo, que volará antes de final de año, mientras que el tercero lo hará en el primer semestre.
Por otra parte, el consejero de Economía, Innovación y Ciencia, Antonio Ávila, destacó ayer que el desarrollo del avión A400M supondrá la subcontratación directa a la industria auxiliar andaluza de carga de trabajo por más de 600 millones a lo largo de la vida del programa, así como la creación de 5.000 empleos.
En su intervención en el Pleno del Parlamento de Andalucía, Ávila celebró el reciente acuerdo alcanzado por los países participantes en el programa y el fabricante EADS para continuar con su desarrollo, y resaltó el "esfuerzo" del Gobierno español para que las negociaciones culminaran con éxito.
