Juan Torres Ruiz, Cala, jugará esta temporada en el Cartagena cedido por una temporada. Ayer tarde, tras una reunión entre las partes, se acordó la salida del canterano, a préstamo y sin opción alguna de compra. Tampoco habrá en principio contraprestación alguna, será una cesión “pura y dura”, según confirmó Emilio de la Riva, representante del jugador.
El futbolista dejó ayer claro, en todo caso, que ha buscado una salida para gozar de continuidad. “Aceptaba ser el cuatro central de la plantilla, pero no el quinto o el sexto, cuando Drago esté recuperado. Esto es fútbol y, como veo que no se cuenta conmigo, se ha tomado la decisión más acertada de disputar minutos en otro club porque quiero crecer y curtirme como jugador, y con ocho o diez partidos no iba a hacerlo”, explicó el de Lebrija.
El canterano, además, aclaró que en principio pensaba que “no iba a venir otro central”, “aunque quizás los resultados hayan provocado esa decisión”. “Lo que más me duele es haber rechazado muchas ofertas de Primera por quedarme en el Sevilla y ahora sólo jugar en Segunda”. Con todo, no guarda ningún rencor a Antonio Álvarez, con el que la relación “es muy buena”. “Tenemos una gran amistad y le tengo un gran cariño porque fue quien me puso en la palestra. Esto hay que aceptarlo como fútbol que es”.
Asimismo, Cala quiso explicar que no se negó a jugar con el Sevilla Atlético, como ya aclaró en este diario el entrenador del filial, Ramón Tejada: “Nunca me negaría a ponerme la camiseta del Sevilla, y menos perteneciendo al club. Esa opción nunca existió porque además cuando se acordó mi renovación se dejó claro que mi ciclo en el filial había terminado”.
JOSÉ CARLOS Y EL UDINESE. Cala no es el único canterano que podría salir en las últimas horas y antes del cierre del mercado, esta noche. José Carlos también tiene encima de la mesa una propuesta del fútbol italiano, en concreto del Udinese, que ha solicitado su cesión para esta temporada. Todo dependerá, en todo caso, del Sevilla y de Antonio Álvarez. Hasta el momento el club nervionense no quería dejarlo marchar y el jugador sólo quería seguir jugando al más alto nivel.
