Que todo trabajador constitucionalmente tiene el derecho a la huelga es inobjetable. Habría que discutir mucho los puntos alejados entre la patronal y sus trabajadores en el fútbol. Los jugadores tienen amplias razones. La LFP también, porque no pueden pagar justos por pecadores. Sepan que los mayores ingresos de la AFE no vienen de sus afiliados, sino de los propios organismos que regulan el fútbol. Gran incongruencia. Como mayor es que los futbolistas importantes (Primera división) una vez que Rubiales haya logrado parar la primera jornada (que será la única), en los días de huelga hayan entrenado 16 equipos, uno de ellos el Barça en doble jornada, y jugando hoy, día de huelga oficial, el Gamper.
Esta es la huelga de unos trabajadores “sui generis” llamados futbolistas. Fíjense cómo está el fútbol en cuanto al aspecto económico en relación por ejemplo con alemanes o ingleses. En ninguno de estos países hay en estos momentos equipos en Ley Concursal. Ninguno. Es más, el que no paga desciende. Pues bien, hablando de dinero, vi el pasado sábado el Bayern Munich-Hamburgo. Durante el partido en los faldones visuales del estadio había un anuncio en el que instaban a abonarse a todos los partidos de liga por 14,95 euros mensuales. Es más el Bayern lo anunciaba en su camiseta. En España ver todos estos partidos vale 41,20 euros al mes. Siguiendo el manirroto mundo del fútbol. Los dos operadores que dan el fútbol español, uno creo que está en Ley Concursal y el otro tiene sus acciones a 1,10 euros cuando salieron al mercado por encima de los 20 euros.
Así está este fútbol profesional español. No hablemos de los dos grandes que no son SA porque tendrían un capítulo importante de cómo han subsistido con recalificaciones y más recalificaciones para tapar agujeros económicos. Es imparable la quiebra económica. Ronearemos con Messis y Cristianos con contratos de más de 10 millones de euros a entrenadores y jugadores pero seremos un ejemplo nefasto de la sinrazón de este fútbol profesional español. Le ganaremos a equipos alemanes e ingleses, pero se nos caerá la cara de vergüenza de ver un día sí y otro también cómo no cumplimos con los pagos y seguimos entrando en Ley Concursal. (Absténganse de este comentario los cumplidores.)
