El comité de empresa de Isla Mágica señaló ayer a la Junta como responsable de que el concurso para adjudicar el parque quede desierto debido a que Martín Casillas se plantea retirar su oferta. Los sindicatos instaron a realizar otro pliego con un canon más bajo y lamentaron que las cajas sean la única opción.
El plazo para la presentación de ofertas para la adjudicación de Isla Mágica concluye el próximo 6 de junio. Y todo apunta a que el concurso quedará desierto, lo que obligará a las cajas a volver a intervenir como responsables de que el parque siga abierto.
La única alternativa que estaba sobre la mesa, la de Martín Casillas e Inverco Iberia está ya casi descartada, después de que la sociedad no haya conseguido el aval de Urbanismo que garantice que se puede ejecutar el proyecto como está planteado, sin trabas administrativas y legales.
Su diseño incluía medidas como soterrar la calle José de Gálvez, abrir una nueva puerta junto al hotel Renacimiento y habilitar una pista de hielo en una parte del lago de la Exposición Universal de 1992.
"Era algo previsible. Sabíamos que con ese pliego que elaboró la Junta no iba a haber ninguna empresa interesada en la concesión. El canon que se ha planteado es exagerado. Son unas condiciones inaceptables. Antes de que el Gobierno andaluz entrase en el proceso, había tres firmas interesadas. Ahora ya no hay ninguna", afirmó el presidente del comité de empresa de Isla Mágica, Joaquín Ramírez, quien mostró su inquietud por la situación que afronta ahora el parque y todos los trabajadores del mismo.
Las cajas están de nuevo obligadas a intervenir en el proyecto, lo que supone una nueva causa de inquietud entre los trabajadores del recinto recreativo, según explicó Ramírez: "Tienen que hacerlo, pero a nosotros se nos genera una situación incómoda, porque no creen en el proyecto y no quieren poner dinero".
La única opción, si se confirma que el concurso para la adjudicación queda desierto, es convocar un nuevo concurso, dentro de un plazo máximo de seis meses. "Esperemos que sean lo suficientemente listos en la Junta como para deterctar los errores del pliego y coger la tijera para que las condiciones sean más accesibles. Para eso, no necesitan ni los seis meses. La situación del parque no es para tirar cohetes y no se deben apurar los plazos", indicó el presidente del comité.
Las dudas se despejarán el próximo día seis de junio cuando se cierre el plazo para la presentación de proyectos para el parque recreativo. Si, como admiten desde la empresa y desde la propia Gerencia de Urbanismo, la oferta de Martín Casillas se retira, se tendrá que adoptar de nuevo la solución de emergencia de las cajas, que suponen "prorrogar la agonía del recinto".
