El remanente de tesorería negativo del Ayuntamiento de Utrera se ha reducido en un 73%. Así lo ha manifestado el alcalde, Francisco Jiménez (PA), quien rindió cuentas de la liquidación del presupuesto 2008. Este documento analiza la evolución real de las cuentas a lo largo del año y sirve para comprobar si se elaboró bajo unas premisas reales de previsión de ingresos y para dar cuenta de cómo se han ejecutado los gastos.
De la liquidación se desprende que el saldo de tesorería ha pasado de 1.973.921 euros negativos en 2007 a 536.580 euros negativos en 2008. El remanente es la magnitud más importante para determinar la situación económica de una entidad local. Está integrado por los datos resultantes de comparar los derechos pendientes de cobro, las obligaciones pendientes de pago y los fondos líquidos de tesorería a 31 de diciembre de 2008.
Según el análisis, las previsiones se establecían en 34.143.662 euros, de los que se han liquidado 34.195.985 euros a lo largo del año, lo que supone una derivación del -0,01%.
En lo que se refiere al gasto y, teniendo en cuenta la situación de remanente negativo del año anterior, se han reducido de los 32.826.894 euros previstos a los 29.388.842 euros de gastos realizados. La mejora de esta cifra es consecuencia del plan económico financiero aprobado por el Pleno el 12 de febrero de 2009. Las principales medidas recogidas en dicho plan se fueron poniendo en marcha a partir del primer borrador elaborado en agosto de 2008, lo que ha originado que la liquidación presente un resultado satisfactorio en lo referente a la mejora del saldo negativo, que se ha reducido un 73%.
Otros datos significativos son los relativos a la recaudación líquida, que es de un 80,28%, y al nivel de pagos realizados, que se sitúa en el 88,52%, lo que indica de qué modo el Consistorio utrerano está cumpliendo con los proveedores. Según la edil de Hacienda, María Ángeles Sánchez, "estos datos distan mucho de los reflejados en la liquidación de 2002, que presentaba unos ingresos recaudados del 41,61% (80,28% en 2008), y un pago de los gastos comprometidos del 44,16% (88,52% en 2008)".
El plan, que contempla la posibilidad de reajustes en función de la evolución de las cifras, tiene como objetivo alcanzar la estabilidad presupuestaria para el próximo año.
