Utrera ha dado a la historia del cante jondo más que ningún otro pueblo de Sevilla, sin discusión alguna. Se le acercan mucho Alcalá de Guadaíra, Mairena del Alcor y Écija, donde no paran de salir artistas. Nombrar aquí a todos los intérpretes del cante que ha dado Utrera sería imposible, pero es necesario citar a los fundamentales: Perrate, su hermana María -madre de El Lebrijano-, Manuel de Angustias, Fernanda y Bernarda, Pepa la Feonga, Gaspar, Curro de Utrera, Enrique Montoya, Bambino...
De todos ellos los que más lejos llevaron el nombre de Utrera fueron Fernanda y Bernarda, dos figuras irrepetibles a las que los jóvenes valores de lo jondo de esta tierra no sólo no quieren olvidar, sino que desean reivindicar como parte fundamental de la memoria flamenca incluso de Andalucía, en un momento en el que lo jondo se debate entre una popularidad extraordinaria en todo el mundo y una más que preocupante pérdida de sus genuinos valores.
El próximo día 12 se va a estrenar en el Teatro Minicipal Enrique de la Cuadra la obra De Utrera al cielo. Los cantes de Fernanda y Bernarda por iniciativa de algunos jóvenes de este pueblo tan flamenco, como, por ejemplo, Pitín Hijo, que es director artístico del espectáculo.
Escuchándolo hablar el pasado miércoles en la Casa de la Cultura, en rueda de prensa, se llegaba a la conclusión de que no todo está perdido. Estos jóvenes flamencos veneran a Las Niñas, como se las llama cariñosamente, lo que nos consuela.
Prueba de ello es este espectáculo con el que quieren demostrar, entre otras muchas cosas, que las nietas de Popá Pinini eran algo más que dos fenómenas de la soleá y de la bulería. Sólo quienes nunca estuvieron de fiesta con estas geniales artistas pueden decir que eran dos cantaoras "cortas".
Muchos peritos en Flamencología creen que ser largos en el cante es tener capacidad para interpretar 30 palos de la baraja flamenca, algo que hoy está al alcance de cualquier intérprete más o menos estudioso. ¿De qué nos sirve que un cantaor sepa hacer 30 cantes si en ninguno tiene la profundidad que tenía Fernanda en la soleá, la cantiña, el fandango o la bulería?
Este espectáculo quiere demostrar que la largura de un cantaor no estriba sólo en la cantidad de estilos.
Para llevar a buen puerto esta aventura, Pitín Hijo ha contado com Inés y Luis, La Macanita, José Valencia, Mari Peña, Jesús de la Frasquita, Gaspar del Cuchara, Tete Peña, Jesús de la Buena y Danideutrera.
Exceptuando a La Macanita y a José Valencia, dos figuras del cante, los demás son artistas de la tierra sin mucho nombre, pero con algo muy importante para los tiempos que corren: compromiso. De lo que se trata es de que Fernanda y Bernarda, y con ellas la Utrera flamenca, sigan estando en el candelero. Este espectáculo se estrenará en Utrera y se llevará a otros municipios, aunque la economía ayudará poco.
Gire o no, una cosa está clara: el compás y el pellizco de Las Niñas va a lograr que los gorriones de la calle Nueva celebren el regreso de estas dos geniales gitanas.
