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Museo Arqueológico/Plaza de América

La Plaza de América es el fragmento de la Exposición Iberoamericana mas cercano a la idea primitiva de pabellones rodeando el parque de María Luisa que Aníbal González planteó originalmente en el concurso...

el 16 sep 2009 / 07:16 h.

La Plaza de América es el fragmento de la Exposición Iberoamericana mas cercano a la idea primitiva de pabellones rodeando el parque de María Luisa que Aníbal González planteó originalmente en el concurso de 1911. Construidos en los años siguientes, los Pabellones de Arte Antiguo, Real y de Bellas Artes conforman un espacio público extraordinariamente atractivo.

Los recintos y la arquitectura de la Exposición de 1929, circundantes del Parque de María Luisa, consolidaron su protección patrimonial cuando se produjo la ampliación del conjunto histórico de Sevilla. Sin embargo, no es comprensible que los edificios de la Iberoamericana no cuenten con los destinos adecuados dentro de un plan director de usos, con la debida coordinación institucional bajo el liderazgo de la ciudad y su Ayuntamiento.

La Plaza de España sigue ofreciendo un orden funcional inapropiado, manteniendo la prevalencia militar establecida con la guerra civil, sin extraer las extraordinarias posibilidades de su magnitud y fuerza simbólica, así como de su centralidad urbana.

El carácter cultural de la Plaza de América es un contrapunto, pero problemático. El que fuera Pabellón Real debe contar también con un destino cultural idóneo, semejante a los Museos de Artes y Costumbres Populares y Arqueológico establecidos en los pabellones de Arte Antiguo y de Bellas Artes de 1929. Por ejemplo, el centro de interpretación que la propia Exposición Iberoamericana necesita.

No obstante, esas localizaciones, resueltas de manera modesta, no se compadecen bien con instituciones del siglo XXI en la capital de Andalucía, un territorio con intensidades etnográfica y arqueológica excepcionales. Esos museos son modestos, como lo son los pabellones que los contienen. Reflexionemos.

Estamos lejos de las magnitudes urbanas y arquitectónicas mediante las que se localizan los museos de las ciudades capitales de Europa. Las conmemoraciones del Milenario de 1896 en Budapest, alrededor del Városliget, propiciaron el establecimiento del Palacio del Arte y del Museo de Bellas Artes franqueando el Monumento al Milenario. Otras magnitudes que se subliman en Viena con el desarrollo posterior del Hofburg en los espacios del Ring, con los museos de Historia Natural y el Kunsthistorischen. Es mas, en el recinto de las caballerizas imperiales se abre hoy al público el MuseumsQuartier, uno de los complejos culturales mas importantes del mundo, donde la arquitectura de Fischer von Erlach se renueva y convive con las obras contemporáneas del Museo Leopoldo y el MUMOK.

En la semana pasada El Correo de Andalucía ha insistido acerca del propósito de reforma integral del Museo Arqueológico y su posible ampliación. En mi opinión, su correcto enfoque ha de basarse en la integral consideración de la Plaza de América como espacio cultural. Los problemas del Arqueológico no pueden resolverse con un anexo vergonzante en su trasera, sino con una relectura de la Plaza de América y sus aledaños. Somos modestos, pero seamos ambiciosos.

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