El Sevilla está con pie y medio en semifinales de Copa tras noquear al Barça y tener groggy al Dépor, con la posibilidad de igualar la mejor clasificación de su historia en la Copa de Europa y a tres puntos de la cuarta plaza que conduce a la Champions. Y eso que a Jiménez le siguen lloviendo palos por doquier de muchos sectores del sevillismo ¿Qué más quieren?
Un sombrerito de Negredo, otro cabezazo de Renato y un jugadón que culminó Navas ante el indeciso portero deportivista Manu, ponen al Sevilla con un pie y parte del otro en las semifinales de la Copa del Rey, en las que se puede reeditar la final de 2007, pues el Getafe rompió el fortín de Son Moix (1-2) y se perfila como el penúltimo obstáculo de cara a la final. Marcar al menos un gol en Riazor se antojaba clave para la suerte de la eliminatoria y Miguel Ángel Lotina lo puso un poco más fácil alineando al portero suplente, que cantó en el 0-1 y no ha disputado ni un minuto en la Liga, donde a Aranzubia no hay quien le tosa. Ni imaginar quiero los palos que le habrían caído a Jiménez de haber hecho lo mismo: ya le han caído por alinear el pasado sábado en el Camp Nou un equipo plagado de suplentes y reservar con excelente criterio a sus mejores hombres para el choque copero de anoche. Queda mucha Liga para enmendar la plana, pero en la Copa, a la que te descuidas, estás fuera. Que le pregunten si no a Pep Guardiola. O a Pellegrini, o al mismo Lotina.
Con pie y medio ya en las semifinales de la Copa, con los dos en los octavos de la Champions y con toda la segunda vuelta por delante en la Liga para enderezar el rumbo y amarrar una plaza entre los tres o cuatro primeros todavía hay quienes se empeñan en buscarle las cosquillas cada semana a Manolo Jiménez y querer ver un fracaso donde hay unos resultados literalmente extraordinarios. ¿O es que hay muchos sevillistas que ordinariamente hayan visto a su equipo en mejores situaciones que ésta? Mejor bagaje de puntos que el de ahora sólo lo tuvo el Sevilla cuatro veces en los 50 últimos años y a semifinales de Copa llegó tantas veces en los cinco últimos (tres), como en los 42 anteriores, por no hablar de la Champions. Así que un poco más de humildad a los que se creyeron eso de ganar la Liga y dicen ahora que sin Jiménez todo iría mejor... Y que los gatitos no les impidan disfrutar del extraordinario momento de su equipo.
