El incendio declarado el sábado en Sierra Plata (Tarifa) quedó estabilizado ayer tras arrasar casi 300 hectáreas de matorral, eucalipto y alcornocal. El fuerte levante dificultó las tareas de extinción de las llamas.
Fuentes de la Consejería de Medio Ambiente informaron de que el perímetro del incendio ya está totalmente rodeado y que no se va a extender más. Las tareas de extinción se centran ahora en el refresco de los puntos calientes del interior del perímetro, hasta el definitivo control del fuego, que afecta a una zona del Parque Natural del Estrecho.
Las condiciones meteorológicas, con rachas de viento de levante de hasta 45 kilómetros hora, son desfavorables para los trabajos de extinción.
No obstante, las fuentes destacaron que la "evolución positiva de los trabajos" rebajó el nivel del incendio al 0, al no haber ya riesgo de afección para las zonas urbanizadas. Las llamas obligaron a desalojar a más de 700 personas del Hotel Atlanterra y de la urbanización Jardines de Atlanterra y provocó grandes retenciones de tráfico por la vuelta precipitada de las playas.
La personas evacuadas pudieron volver ayer a sus residencias. El desalojo se adoptó como medida preventiva, ya que en la zona había rachas de viento de levante que alcanzaban los 80 kilómetros por hora y dificultaron las tareas de extinción del fuego, que se declaró sobre las 12.40 horas en el paraje de El Realillo.
El operativo está integrado por tres técnicos, junto con 35 especialistas de extinción, tres vehículos autobomba, dos de maquinaria pesada, la Unidad Móvil de Meteorología y Transmisiones y la Unidad de Análisis y Seguimiento de Incendios Forestales.
