Mientras el país se divide más que nunca. Mientras mueren a tiros personas en Nicaragua, se ahogan inmigrantes en el mar, el hombre más poderoso del mundo está para un manicomio, las arcas del Estado resuenan a hueco, el hambre es una realidad, la sanidad no es capaz de mantenerse por falta de liquidez, etc., etc., etc. Ahora resulta que lo verdaderamente importante es mover a los muertos de sus tumbas porque la memoria histórica hiere la sensibilidad de unos cuantos. Esto pasa de ser vergonzoso e indignante a pensar que es una broma. Que una hermandad como la Macarena sea noticia a nivel nacional por los restos de Queipo de Llano y su mujer Genoveva acaparando todos los titulares de televisiones y periódicos es para pedir exilio político en la Conchinchina. Las leyes están para acatarlas y así se hará desde la corporación, siempre dando el merecido trato cristiano a los fallecidos. Pero dónde están todos esos oportunistas carroñeros, progres de tres al cuarto, perroflautas contrasistemas cuando desde acción social se atienden a tantos vecinos de la ciudad, los conventos abandonados, los jóvenes sin recursos para estudiar y labrarse un futuro y así un largo etcétera donde miles y miles de euros son destinados gracias al esfuerzo de muchos. ¿Por qué sois tan valientes con los muertos y tan cobardes con los vivos? Dejad las pancartitas y los gritos en la puerta de la basílica que mientras vomitáis mamarrachadas en la calle dentro estamos rezando también por vuestros muertos y molestáis. Hazme un favor, sé feliz. ~