Un joven se lanza a tumba abierta a por la bandera estrenando así el primer día del tradicional juego de la cucaña, incluído en las olimpiadas del barrio
Por si acaso no han sido capaces de superar la nota de corte para participar en los Juegos Olímpicos de Londres, el distrito Triana le ofrece una solución alternativa. De cara a la celebración de la Velá de Santa Ana ha puesto en marcha una curiosa iniciativa en la que los vecinos del barrio y todos aquellos sevillanos que se atrevan podrán demostrar sus amplio catálogo de destrezas deportivas. Se trata de la primera Trianá Deportiva, o lo que es lo mismo, las primeras olimpiadas del barrio de Triana en la que están llamadas a participar todas las entidades vecinales, comerciales y culturales de la otra orilla del Guadalquivir.Con carácter amateur, la iniciativa está abierta a toda la ciudadanía, sin necesidad de tener avalada una destacada trayectoria deportiva. Así lo anuncia el propio lema de la competición, "lo importante es participar", parafraseando aquellas palabras que el barón Pierre de Coubertain pronunciara en el discurso inaugural de las Olimpiadas que se celebraron en la ciudad de Londres en el año 1908. Sin duda alguna, una dosis de optimismo para aquellos que sólo quieran acudir a las actividades con ganas de disfrutar de una tarde de diversión.
En total serán siete las pruebas que compongan esta competición deportiva -la primera tuvo lugar el pasado lunes con una gran aceptación- con una distribución similar al heptatlón. De unas características muy variadas, aquellos que decidan enrolarse en la competición podrán disfrutar desde una carrera por el barrio, pruebas de natación en el Guadalquivir, una maratón de fútbol-sala o la tradicional cucaña. Un amplio programa que se completará con la organización de los trofeos de piragüismo y remo por las aguas del Guadalquivir, entre los puentes de Triana y de San Telmo.
La parada más reciente de estas Olimpiadas tuvo lugar el sábado pasado, con la celebración del primer Acuatlón Velá de Triana, organizado por la Federación Andaluza de Triatlón que, pese a la polémica en la que se vío envuelto por el enfado de los placeros del mercado -que incluso intentaron parar la prueba por las molestias que les ocasionaba-, acabó con éxito. También se celebró este pasado fin de semana celebrando las 24 horas de maratón de fútbol sala en el pabellón del Mar de Plata, donde los participantes están demostraron que el deporte no está reñido con el descando nocturno.
A partir de ayer y durante esta semana -del 22 al 26 de julio- comienza en la zapata de la calle Betis la tradicional cucaña, santo y seña de la Velá de Santa Ana, en sus dos categorías. Por un lado los menores, entre 15 y 18 años, y por otro, los senior. Aunque no será deporte olímpico en Londres, los sevillanos buscarán el ansiado trofeo de la bandera que se sitúa en el extremo del mástil, ya sea por el premio económico o por el chapuzón que generalmente recibe todo el que se atreve a probar suerte. Para este año, la comisión organizadora ha dispuesto cinco banderas diarias en cada una de las categorías.
Las últimas actividades de la Olimpiada tendrá de nuevo como protagonista al río. Los días 25 y 26 de julio se celebrarán los trofeos de piragüismo y remo, en categorías que van desde la benjamín -a partir de los ocho años- hasta los veteranos, para los de más de 40 años. Aunque para el final quedará lo más divertido. La tarde de 26 de julio, Triana se llenarán de juegos de épocas pasadas, convirtiendo a los participantes en niños que se atreverán con las chapas, las carreras de sacos, las siete y media o el aro, entre otras actividades de siempre. Al fin y al cabo nunca se deja de ser joven para mantener el espíritu competitivo, ni siquiera para ser deportista -aún está a tiempo- en unas olimpiadas... de Triana.
