El Betis pudo sentenciar su clasificación para los cuartos de final de la Copa del Rey en el estadio de Gran Canaria, pero no lo hizo y deberá certificar su pase el próximo 10 de enero en el Benito Villamarín, donde los de Mel partirán con la pequeña ventaja del 1-1 logrado fuera de casa y el factor campo a favor, aunque cualquier derrota, por mínima que sea, les dejaría fuera, de ahí que el técnico bético no pueda permitirse el lujo de hacer tantos cambios como los que hizo ayer para refrescar al equipo.
Anoche el Betis se presentó en el estadio de Gran Canaria con nueve cambios en su formación titular, pues respecto de los que jugaron contra el Barça sólo repitieron de inicio Nacho y Campbell. Y lo cierto es que tardaron en cogerle el aire al partido, que no pasaron a dominar hasta bien entrtada la segunda parte, cuando entraron al campo Rubén Castro y Beñat, sus mejores futbolistas.
La primera parte de los béticos fue muy desordenada, algo por otra parte lógico si el doble pivote lo comparten dos futbolistas del talante de Nosa y Rubén Pérez. El nigeriano perdió varios balones claros en el inicio y se cargó muy pronto con una amarilla (a los 8 minutos) que le lastraron en los primeros compases del choque, aunque luego se fue viniendo arriba –cuando Mel adelantó su posición, tras la entrada de Beñat– y acabaría por completar uno de sus mejores partidos como bético.
Sin desplegar un fútbol brillante, los verdiblancos sí que gozaron de un par de buenas ocasiones –en pies de Campbell y Jorge Molina– para haberse ido al descanso con ventaja, pero en ambas apareció el meta Barbosa para mantener intacto el 0-0, con el que se llegó al descanso.
Tras el mismo salieron los béticos más decididos a dejar el pleito resuelto: primero asistió Molina a Campbell (49’) y luego Mario, tras una gran cabalgada, al propio Molina (50’), pero primero Barbosa y luego la falta de puntería del delantero bético propiciaron que el 0-0 inicial se mantuviera inalterable, aunque en ello también tuvo mucho que ver el meta Casto, al que en un minuto se le acumuló todo el trabajo de la noche, pues entre el 52’ y 53’ tuvo que emplearse a fondo hasta tres veces seguidas para evitar que Thievy, David García y Vitolo anotaran el 1-0 para los canarios
Entran Rubén y Beñat // Fue el aviso para que Mel se decidiera a adelantar unos minutos los cambios previstos: en el 55’ dio entrada a Rubén Castro –al que la aficion local recibió con pitos– y cinco después a Beñat. Y entonces se pasó a ver otro partido. El vasco tomó el mando de las operaciones y Nosa empezó a soltarse en la media punta, bien cubiertos ambos por el trabajo a destajo de Ruben Pérez, que supo hacer la raya para que los canarios no pasaran de la medular.
En una jugada de estrategia Beñat dejó solo a Rubén Castro (63’), pero su inocente remate lo salvó el portero local, que hacía tiempo se había convertido en el mejor de su equipo, aunque nada pudo hacer Barbosa cuatro minutos más tarde cuando una combinación al primer toque entre Pozuelo y Molina la resolvió el pichichi bético con un espléndido remate, tal y como lo venía.
Tuvo el propio Rubén la sentencia, tras una gran jugada de Nosa, que lo habilitó solo ante el portero, pero de nuevo Barbosa ganó la partida, así que la Unión Deportiva llegó con vida a los minutos finales, donde encontraría premio a su empeño. Los canarios nunca se dieron por vencidos y a falta de seis minutos lograron el empate por medio de Chrisantus y ya suman doce partidos seguidos sin conocer la derrota, así que llegarán el día 10 de enero al Villamarín dispuestos a dar guerra. El 1-1 no es mal resultado para el Betis, pero no permite confianzas. Habrá que ir con todo. .
1 - LAS PALMAS: Barbosa, Pignol, David García, Murillo, Corrales, Javi Castellano, Nauzet (Vicente Gómez, m. 60), Vitolo, Momo, Thievy y Javi Guerrero (Chrisantus, m. 45).
1 - REAL BETIS: Casto; Ángel, Paulao, Mario (Amaya, m. 68), Nacho; Agra (Beñat, m. 60), Rubén Pérez, Nosa, Campbell (Rubén Castro, m. 55); Pozuelo y Jorge Molina.
Goles 0-1, m. 66, Rubén Castro; 1-1, m. 84, Chrisantus.
Árbitro: Delgado Ferreiro. Amonestó a Murillo, Corrales y Nauzet, por Las Palmas, y a Nosa, Mario y Rubén Pérez, del Betis.
