Y eso que la gran mayoría de los que cargados de bolsas de plástico llegaban hasta el paseo Marqués de Contadero no tienen trabajo. Es el caso de Vicky Romero y José Manuel Vela, de San Juan: "Estamos en paro y no podemos sacarnos el carnet, y de esta manera podemos ir al Betis y además ayudar".
Como ellos, una treintena de personas, la mayoría jóvenes, esperaban a mediodía de ayer bajo la lluvia a que llegaran desde el Benito Villamarín otras 350 entradas que el club tuvo que dar al Banco de Alimentos tras agotarse las 500 que tenían en un primer momento para repartir entre las personas que se acercaran con al menos 10 kilos de comida.
"Ayer se dieron 430 del cupo de 500, antes del triunfo en Getafe y ahora la gente está incluso más animada", afirmaba Juan Romero, director de comunicación de Banco de Alimentos, quien destacaba el éxito de esta "muy buena iniciativa dirigida a la afición futbolera, aunque estamos abiertos a que cualquier empresa o institución invente o se le ocurra una buena idea como ésta". Y es que, sólo con las entradas que ha dado el Betis -a estas 850 hay que añadir las 1.500 que reparte la Obra Social de La Caixa en una campaña interna de recogida de alimentos-, más lo que se recoja antes del partido en distintos puntos de los alrededores del estadio heliopolitano, y contando con que la entidad bancaria duplicará la cantidad recogida, se pueden superar los 50.000 kilos de alimentos no perecederos.
"La devoción por el Betis es muy grande, y ayudar también, porque si hubieran puesto las entradas a 10 euros lo mismo no las comprábamos". Así lo reconocían en la cola cinco amigos de Écija, cuatro de ellos desempleados: José Manuel Rodríguez, Antonio Campuzano, Raúl Rodríguez, David Carmona y Carlos Banqueri que, nos obstante, se quejaban de la falta de comunicación y desorganización: "Ya vinimos ayer [el lunes] por la tarde, porque en ningún lado se informaba de los horarios, y sólo está abierto por la mañana", afirmaban, para añadir: "Aun así esta iniciativa la tendrían que seguir otros equipos".
Pablo Castellano y José Ángel Gómez son de Osuna, pero estudian en Sevilla, y también se acercaron para participar en estar iniciativa: "Es barato ver al Betis así y encima se ofrece una ayuda social, una buena iniciativa que debía estar mejor gestionada y organizada". La cola seguía en aumento para recoger las últimas 350 entradas. Por Marqués de Contadero se seguían acercando jóvenes con bolsas, paraguas, y hasta con perro, todo por una entrada, y por generosidad.