Local

Salto reivindicativo para salvar el Guadalquivir

el 08 jul 2012 / 15:12 h.

TAGS:

-->-->-->

¿Se atrevería a darse un baño en el río? Un grupo de jóvenes se lanzó ayer al Guadalquivir para llamar la atención sobre la conservación de la cuenca fluvial. El chapuzón simbólico y reivindicativo se enmarca dentro de la cita anual que la organización ecologista WWF (antigua Adena) organiza en varias ciudades para exigir unos "ríos vivos y limpios" con un caudal saludable para el ocio y la protección de los ecosistemas ribereños como obliga la Unión Europea para 2015. El Big Jump, que así se llama esta protesta nacida hace diez años en el Elba, se produjo a las doce del mediodía de manera conjunta en distintos ríos de Madrid, Córdoba y Sevilla.

En el caso de la capital hispalense lleva varios años realizándose "con bastante afluencia de público". Sin embargo, el calor (rozando los cuarenta grados) y el éxodo de muchos sevillanos a la playas, restó afluencia al salto de este año. De hecho, fueron unos 20 los que, ataviados con camisetas blancas y al grito de "ríos vivos", se atrevieron a dar unas brazadas en el Guadalquivir, a la altura del embarcadero del Paseo Marqués de Contadero.

"Está fresquita, se apetecía el chapuzón", explicaba uno de los bañistas nada más salir del agua. Entre los participantes se pudieron ver a varios miembros del Club de Piragüismo de Sevilla, que, a título individual, se suma_ron a la protesta para mostrar de esta manera su preocupación por la calidad de las aguas, de las que son grandes usuarios: "Presenta un estado lamentable, de abandono, con mucha turbidez. Es una pena", reconocía José, uno de los intrépidos saltantes.

Pese a todo, la WWF se mostró satisfecha con la celebración de la protesta, aunque reconoció que les gustaría "no tener que hacerla porque el río ya estuviera limpio y con una calidad óptima".

Y es que lo que para algunos puede parecer una locura, hace unos años era una práctica habitual en esta ciudad. Se trata del baño en el río, "un hábito que hay que recuperar, pues en algunas zonas de Triana no era raro darse un chapuzón en el Guadalquivir", apuntó durante el baño el portavoz de la entidad ecologista, Juanjo Carmona, quien recordó lo importante que es "saber dón_de hay que bañarse, pues tradicionalmente se hacía en toda la margen del viejo arrabal".

De momento no es posible, dado el estado de las aguas y pese a que la Unión Europea obliga a recuperar el estado ecológico de todos los ríos del Viejo Continente de aquí a tres años. En el caso del Guadalquivir es una de sus asignaturas pendientes. Según alertaron los ecologistas, el río sevillano no goza de buena salud. "Los científicos ya han advertido de que sus aguas tienen problemas de turbidez en el estuario por sólidos en suspensión, y que arrastra graves problemas de contaminación por los vertidos agrícolas e industriales". A lo que Carmona añadió los daños colaterales que supone la navegación, pues "el oleaje que se levanta se está comiendo las riberas".

Pero no sólo se busca el mantenimiento de los ecosistemas de las riberas -muchos de ellos "seriamente deteriorados"-, la protesta de ayer trataba de concienciar de la importancia de recuperar los ríos como espacios de ocio que propicien el turismo. "Hablamos también de una bajada de la capacidad turística". _Una fuente de ingresos que, en tiempos de crisis como los que corren, vendría muy bien para "una Sevilla que tiene que vivir de cara al río", resaltó Carmona.

  • 1