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La nueva generación del Nissan Qashqai no tiene un diseño arriesgado sino conservador. La carrocería es más ligera
Nissan renueva por completo uno de sus modelos de mayor éxito comercial desde que fuese presentado en 2007, dado el enorme auge que suscitó entonces el segmento de los vehículos de tipo SUV, en el que el Qashqai representa siempre una alternativa con una buena relación entre equipamiento y precio. Hay modelos con mejor acabado y cuya conducción es más gratificante, pero a costa de un precio superior y con una diferencia que para mucha gente puede no justificar el mayor desembolso.
La tercera generación del Nissan Qashqai estará disponible a partir de este verano (por lo que, como suele ocurrir, puede ser un momento interesante para hacerse con una unidad del Qashqai que actualmente sigue a la venta, ya que es previsible que comiencen las campañas de descuento más agresivas). El nuevo modelo está desarrollado sobre una plataforma de reciente creación, compartida con Renault y preparada para lo que exige el mercado actual si un fabricante quiere cumplir con las estrictas normas anticontaminación: la electrificación. Sólo limitando el incremento en emisiones se evita que el precio aumente debido a las nuevas normas impositivas traídas con el protocolo de emisiones WLTP.
Es decir, el nuevo Nissan Qasqai estará disponible con versiones microhíbridas e híbridas no enchufables (la diferencia entre el primer y el segundo tipo es que ambas cuentan con un motor eléctrico que apoya al motor de combustión, pero en los microhíbridos el motor eléctrico no puede mover por sí solo el coche, sino que sirve para disminuir el consumo de combustible, y en los híbridos el coche puede avanzar sólo con el motor eléctrico en condiciones favorables).
Una de las cualidades a destacar del nuevo Qashqai es que su carrocería será menos pesada que la del modelo previo, debido a que muchas de las piezas que la componen están fabricadas en aluminio (que es más caro que el acero y requiere de técnicas más complejas para la fabricación de chapas estampadas) o en materiales compuestos. Reducir el peso va en beneficio del consumo de carburante y es una medida excelente para contrarrestar la ganancia en kilos que supone el tener que ubicar los componentes eléctricos adicionales de las versiones electrificadas, como la batería o el motor.
El nuevo Qashqai sigue midiendo prácticamente lo mismo que antes, 4,43 metros de longitud. Se enfrenta, por tanto, a modelos como el Opel Grandland, el Volkswagen Tiguan o el Subaru XV. Ha ganado tres centímetros. Según Nissan, el pequeño incremento se nota en el habitáculo, que ofrece un poco más de espacio para las piernas en las plazas traseras y, de paso, más altura interior de carrocería para que la habitabilidad sea menos problemática en el caso de que viajen pasajeros de gran estatura.
Nissan ofrecerá inicialmente el Qashqai con dos motores de gasolina 1.3 microhibridados, con potencias de 140 y 158 caballos, más una versión híbrida de 190 caballos con un esquema de funcionamiento ya conocido en algunos modelos de Renault, que consiste en que las ruedas las mueve siempre el motor eléctrico, que se nutre de potencia tanto de la generada por el motor de gasolina (de 157 caballos) como de la almacenada en la batería de litio, que tiene 1,4 kWh de capacidad. Esta versión tendrá la denominación Qashqai e-Power. Una cualidad que va en beneficio del consumo y de la comodidad de uso de esta versión es que se puede circular usando sólo el pedal del acelerador, como en los coches 100 % eléctricos, porque al levantar el pie del pedal el coche sufre una deceleración moderada y constante hasta la detención. De esta forma, aprendiendo a modular la cantidad de acelerador, se puede circular sin pisar el freno y optimizando el gasto de combustible al aprovechar la frenada regenerativa que proporciona el motor eléctrico. A todos los Qashqai, independientemente del motor, les corresponde la etiqueta ECO de la DGT.
Nissan ofrecerá las dos versiones de menor potencia con caja de cambios manual de seis marchas, aunque para la de 158 caballos estará disponible un cambio automático. El Qashqai e-Power tiene transmisión automática y tracción delantera como única opción. La posibilidad de contar con tracción a las cuatro ruedas sólo está disponible para el Qashqai de gasolina más potente.
Nissan ha anunciado que algunas versiones tendrán un sistema multimedia nuevo, algo de agradecer dado que el que está disponible en la actualidad está claramente desfasado y ofrece un funcionamiento poco intuitivo. También hay mejoras en los asistentes a la conducción, que ya de por sí son avanzados y fáciles de utilizar en el actual Qashqai. Algunas medidas técnicas adicionales tomada en el diseño del nuevo Qashqai están destinadas a reducir la resistencia al aire, como la parte baja de la carrocería completamente cubierta (carenada).