Moreno se compromete a solucionar los problemas "enquistados" de Andalucía: "Tendremos que tomar decisiones difíciles para que las cosas funcionen"

Bajo la tarde del penúltimo jueves de octubre y ante el auditorio amigo que poblaba la reunión de la Junta Directiva Autonómica del PP andaluz celebrada en Málaga, Juanma Moreno se alejó del discurso triunfalista e idílico de otras ocasiones: "Tendremos que tomar decisiones difíciles para que las cosas funcionen. A veces, para hacer una tortilla hay que romper unos huevos, pero siempre pensando en el interés general, en los andaluces. No tenemos que agachar la cabeza ni arrugarnos por mucho que chillen, somos conscientes de lo que estamos haciendo", afirmó antes de pisar un terreno en el que admitió la existencia de problemas abrazándolos al adjetivo "enquistados" y dando a entender que la oposición los está exagerando con "las mentiras que repiten una y otra vez". Se refirió, sobre todo, a la sanidad y la dependencia. Incluso, hizo menciones más adelante a los índices de pobreza o a la vivienda. 

"Los resolveremos gobernando, que la derecha y la izquierda no sueñen que van a tumbar al Gobierno de pueblo", llegó a decir tras admitir problemas como los de la atención primaria o las listas de espera sin perder de vista un panorama como el actual, en el que la investigación sobre los contratos del Servicio Andaluz de Salud (SAS) está bajos los focos mediáticos. Además, Moreno salió a responderle en clave a aquellas voces que le insinúan que el Barómetro Andaluz del Centra no le ha salido esta vez tan favorable:"No hay ningún barómetro que supere a estar en la calle, que ahí es dónde se hacen las críticas y yo las escucho", apuntó.  

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En un discurso en el que enumeró mucho de los logros de los que presume como presidente del Gobierno andaluz, el presidente sostuvo que "lo datos no le gustan al PSOE porque los datos matan al relato". "El PSOE está intentando construir un relato oscuro, no del Gobierno de Andalucía sino de lo que es Andalucía", lamentó antes de situarse en la trinchera de la sanidad pública con ciertas concesiones a la autocrítica a las que no siempre acostumbra.

"Que haya zonas estructurales de pobreza desde hace 40 años no tiene nada que ver con que hayamos alcanzado cotas de bienestar que no existían y claro que tenemos problemas enquistados en la sanidad; en la atención primaria y las listas de espera tenemos problemas enquistados, pero no hay ni un solo dato que diga que la sanidad pública está peor que hace cinco años, no compremos una mentira que repiten una y otra vez".

"Gobierno del pueblo"

Moreno, como era previsible, no dejó fuera de su oratoria las reivindicaciones con las que retrata a Andalucía como una comunidad infrafinanciada. Y lo hizo cuando garantizó que su "Gobierno del pueblo" resolverá los problemas que poco antes había admitido: "Somos el gobierno del pueblo por una razón. Porque es el pueblo andaluz el que nos ha dado esa potestad. A él nos debemos, a él le tenemos el máximo respeto y por él nos vamos a dejar la piel para resolver problemas irresolubles o problemas estancados desde hace muchos años. Y, por supuesto, que nos vamos a dedicar a la sanidad, a la dependencia, a pesar de tener menos recursos. No es ninguna excusa, no es ninguna excusa. Tenemos la obligación de sacar adelante todos y cada uno de los proyectos en los que nos hemos comprometido. Tenemos la obligación de dejarnos la piel para que las cosas funcionen mejor, a pesar de no tener los recursos que nos corresponden. Y no vamos a poner nunca ninguna excusa, lo vamos a hacer. Pero el ciudadano también tiene que saber que hacemos las cosas con una mano atada a la espalda, que hacemos las cosas con menos recursos que los demás, que tenemos muchísimas más dificultades que el resto de territorio, especialmente los privilegiados, para poder hacer las mismas políticas que ellos hacen".

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Y, en esas, se aferró a la estabilidad de su Gobierno como camino que, en su opinión, conduce a la salida del laberinto: "Vamos a resolver esos problemas, vamos a gobernar cueste a quien le cueste por muchos palos a las ruedas que nos pongan; que ni sueñen que lo van a conseguir con toda esta campaña de publicidad orquestada por Moncloa y orquestada por la extrema en un lado y la extrema en el otro, los de la derecha y la izquierda que se unen en las críticas. Mirad en las redes. Exactamente los mismos titulares, los mismos argumentos. Que ni sueñen que juntos los de la derecha y los de la izquierda van a ser capaz de tumbar al gobierno del pueblo, que ni sueñen que van a tumbar al gobierno del pueblo que es el del PP, que ni sueñen con tumbarlo por muchas mentiras que digan", reiteró un Moreno visiblemente azorado.

El presidente andaluz subió el tono hasta el punto de pronunciarse en los siguientes términos: "Me importa un comino todo el politiqueo que el PSOE nos trae con sus problemas internos, a nosotros nos importan los andaluces; el politiqueo, el ruido, el fango y el miedo, para ellos, nosotros a lo nuestro", afirmó.

Asimismo, Moreno cargó las tintas contra "la estrategia de Pedro Sánchez de dividirnos por casa y por pueblo porque pensamos diferente". "No caigáis en esa estrategia del PSOE para embarrarlo todo y olvidar que estamos aquí para gestionar los servicios a los ciudadanos; vamos a redoblar los esfuerzos para solucionar los problemas, estamos para gobernar y vamos a gobernar le pese a quién le pese", insistió en el epílogo de su intervención.