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Alfonso Sánchez, durante el partido de esta mañana. / Efe
Pudo poner Baloncesto Sevilla la guinda al partido 600 de Berni Rodríguez en la ACB, pudo poner la guinda a una mañana en la que Nikola Radicevic volvía a las pistas un año después, pero se marchó con sabor agridulce víctima de sus propios errores, que les impidió cerrar un encuentro que tenía en su mano, tras la exhibición ofensiva del tercer cuarto, en el que sumó 35 puntos, 18 de ellos de Nachbar. La actuación del esloveno resumió bien el partido, porque anotó 28 puntos y cometió 5 pérdidas, cuatro de ellas en la parte final del último cuarto, donde no aportó ningún punto a un equipo que concedió 11 rebotes ofensivos en el último periodo, 21 en el global, y 7 pérdidas, 15 en todo el partido.
Fue una primera mitad de encuentro con defensas desenfadadas, más si cabe la sevillana, que en el primer cuarto cedía ya sin rubor rebotes bajo su aro. CAI Zaragoza fue aumentando su agresividad ofensiva, de la que obtuvo réditos desde el tiro libre, lugar desde donde remontar la ventaja inicial cajista, con la tradicional iniciativa de Nachbar en los primeros minutos (8-12). El parcial de 12-0 lo frenó el esloveno desde el triple, momentos en que Kravtsov campaba en la zona a sus anchas, hasta que saltó Jordan y lo puso firme. El jamaicano jugó excelentes minutos, resolviendo con clase varios uno contra uno ante el ucraniano, que pasó de hacer tres mates a observar como los hacía Jordan, que se iba al descanso como el mejor anotador del choque (11 puntos y 19 de valoración). El CAI aprovechó bien los errores de Baloncesto Sevilla para correr y anotar canastas fáciles, y de esa forma logró la máxima ventaja del encuentro (42-33), reducida ligeramente por los visitantes antes de marcharse a vestuarios (45-38).
El tercer cuarto fue realmente impactante, una exhibición ofensiva de los hispalenses, que descerrajaron hasta cinco triples sin fallo entre Nachbar y Bamforth y el partido giró (63-73) de una forma que parecía definitiva. Se escuchaban incluso pitos a sus jugadores por parte de la afición del Príncipe Felipe, en un cuarto que se cerró con 69-75.
El decimosegundo triple, obra de Alfonso Sánchez, mantenía dominador al Caja (75-83), al que se le empezó a escapar el partido cediendo hasta tres rebotes bajo su aro en una misma acción. De esta forma, los aragoneses fueron poco a poco limando distancias, porque en la otra zona Baloncesto Sevilla se enredaba, y sumaba pérdidas, ataques en los que ni siquiera llegaba a tirar. Y pasó lo inevitable: Sastre clavó un triple para voltear el marcador (89-87) y Tomás Bellas le puso rúbrica a la victoria del CAI, que capturó más rebotes en el aro del Caja (21), que en el propio (19). Los sevillanos pasaron de rozar la perfección en ataque en el tercer cuarto (35 puntos) a cavar su tumba en el último (12).
Ficha técnica:
91. CAI Zaragoza (25+20+24+22): Bellas (5), Sastre (15), Linhart (6), Fotu (4), Norel (7) -cinco inicial-, Henry (3), García (2), Tomás (6), Swing (6), Kravtsov (13) y Jelovac (20).
87. Baloncesto Sevilla (18+22+35+12): Hakanson (11), Bamforth (18), Berni (0), Nachbar (28), Balvin (3) -cinco inicial-, Radicevic (2), Sánchez (5), Miljenovic (0), Oriola (1), Henton (3) y Jordan (16).
Árbitros: Peruga, Oyón y Munar. Eliminaron por personales a Balvin (m. 40).
Incidencias: partido de la jornada 33 de la Liga Endesa. Pabellón Príncipe Felipe de Zaragoza. Unos 5.500 aficionados.