UGT estudia impugnar el convenio del campo sevillano

El sindicato critica la pérdida de poder adquisitivo que sufrirán los trabajadores y denuncia la abolición del derecho de los 15 minutos de bocadillo

13 jul 2018 / 12:38 h - Actualizado: 13 jul 2018 / 13:35 h.
"Agricultura","Convenio laboral"
  • Berjano, Ginés y Coronel, en rueda de prensa. / Manuel Gómez
    Berjano, Ginés y Coronel, en rueda de prensa. / Manuel Gómez

El sindicato UGT estudia, junto a sus servicio jurídicos, la impugnación del convenio del campo sevillano rubricado este jueves por la patronal Asaja y CCOO, después de año y medio de negociación. En opinión del secretario general de la federación Industria, Construcción y Agro (FICA) de UGT, José Berjano, el acuerdo firmado implica «una pérdida de poder adquisitivo», a pesar de la subida salarial del cinco por ciento acordada para el lustro de vigencia del convenio (entre 2017 y 2021). Para UGT, el documento supone una «traición a la clase trabajadora» del campo, que inclusó llegó a paralizar con una huelga la recogida de fruta de hueso para reclamar sus derechos.

Una de las líneas rojas del sindicato para firmar el convenio –el anterior tampoco lo rubricaron– eran los 15 minutos de bocadillo. Con el acuerdo entre la patronal y CCOO, los trabajadores del campo «pierden un derecho que costó mucho conseguir en los años 90», señala Berjano, que ha estado acompañado por el secretario general de UGT Sevilla, Juan Bautista Ginés, y del responsable agrícola de FICA, Manuel Coronel. Los jornaleros «tendrán que hacer un sobresfuerzo para recuperar ese cuarto de hora», lo que implica, según Berjano, que las 39 horas semanales acordadas en el convenio «se convertirán en 40 horas y media».

Otra de las reclamaciones del sindicato es el contrato por escrito y que está provocando «un gran fraude en el campo». Berjano recalca que si no existe un documento que acredite la relación laboral entre el trabajador y el empresario ante un caso de accidente laboral, por ejemplo, el primero queda desamparado. Además, sentencian la práctica «generalizada» de externalizar la mano de obra.

Desde UGT reprueban a CCOO que firme un convenio que «precariza, humilla y pisotea al trabajador del campo». Además, critican que no se tenga en cuenta en la negociación colectiva a otras organizaciones agrarias como COAG o UPA.