EEUU abate a 10 dirigentes del EI, uno de ellos ligado a los ataques de París

Se trata de Charaffe al Mouadan, «vínculo directo» con el líder de los atentados de la capital francesa el 13 de noviembre

29 dic 2015 / 22:04 h - Actualizado: 29 dic 2015 / 22:05 h.
"Atentados en París","La amenaza yihadista"
  • Varios iraquíes desplazados de Ramadi rezan en un campo de refugiados de Bagdad, Irak. La ciudad se enfrenta al reto de la reconstrucción y la vuelta de los desplazados, después de su liberación del yugo del grupo terrorista Estado Islámico (EI), que ha dejado la ciudad sembrada de explosivos. / Efe
    Varios iraquíes desplazados de Ramadi rezan en un campo de refugiados de Bagdad, Irak. La ciudad se enfrenta al reto de la reconstrucción y la vuelta de los desplazados, después de su liberación del yugo del grupo terrorista Estado Islámico (EI), que ha dejado la ciudad sembrada de explosivos. / Efe

EEUU esperó a que las fuerzas iraquíes completaran la toma de la ciudad de Ramadi y expulsaran de allí al Estado Islámico (EI) para anunciar la muerte de diez dirigentes de este grupo terrorista, entre ellos un «contacto directo» del cabecilla de los atentados del pasado noviembre en París.

El portavoz de la misión estadounidense en Irak contra el EI, coronel Steve Warren, anunció en un teleconferencia que, desde el 7 de diciembre y de manera constante, han acabado con la vida de diez líderes del grupo yihadista en bombardeos en Siria e Irak.

Warren destacó la muerte en Siria el pasado día 24 de Charaffe al Mouadan, dirigente del EI y «vínculo directo» con el líder de los atentados del 13 de noviembre en París, el belga de origen marroquí Abdelhamid Abaaoud.

«Lo matamos el 24 de diciembre en Siria, cuando estaba preparando activamente nuevos ataques contra Occidente», aseguró Warren, quien también reveló que otro de los fallecidos era encargado de falsificaciones para la red que contribuyó a los atentados de París, que causaron 130 muertos.

Los investigadores franceses hallaron un pasaporte sirio falso con el que Ahmed Almuhamed, uno de los atacantes suicidas de París, pudo llegar a Europa infiltrado entre los refugiados que huían de la guerra en Siria.

El portavoz confirmó que otro de los diez líderes del EI muertos en los ataques es Siful Haq Sujen, un bangladesí que estudió en Reino Unido y tenía conocimientos para realizar ciberataques y operaciones de contrainteligencia.

También acabaron con la vida el 7 de diciembre de un responsable de gestión de finanzas y equipamiento del EI; y con el emir del EI en la provincia de Kirkuk (Irak), Abu Wadha.

El anuncio de la decena de líderes yihadistas muertos, que cayeron en bombardeos efectuados entre el 7 y 27 de diciembre, se efectuó al día siguiente de que el Ejército iraquí tomara el centro de gobierno de la ciudad de Ramadi, la capital de la provincia iraquí de Al Anbar, de mayoría de población musulmana suní.

La caída de Ramadi puso fin a siete meses de ocupación de la ciudad por parte del EI, cuyos avances en Irak y Siria habían elevado las críticas a la estrategia estadounidense, que parecía no estar frenando a los yihadistas.

«Además de nuestras operaciones tácticas, estamos golpeando la cabeza de la serpiente con la muerte de líderes del EI. En un mes, hemos neutralizado a diez dirigentes en bombardeos, incluidos planificadores de ataques externos, vinculados a los ataques de París o a nuevas operaciones contra Occidente», explicó Warren.

La toma de Ramadi, a solo cien kilómetros de Bagdad, permite a Estados Unidos cerrar con un signos positivo un año complicado en materia de seguridad y defensa, en el que se ha producido la entrada efectiva de Rusia en el conflicto sirio en apoyo del presidente de Siria, Bachar al Asad, a quien Washington exige que abandone el poder.

La toma de control de Ramadi puede convertirse en un punto de inflexión en la guerra contra el EI en Irak, especialmente de cara a los avances hacia Mosul, la segunda ciudad del país y en manos de los yihadistas desde junio de 2014.

Warren confió hoy en que los iraquíes puedan mantener el control de Ramadi, teniendo en cuenta que en las últimas 24 horas no han visto a un enemigo «capaz de coordinar ningún tipo combate y sin ninguna capacidad como para montar claramente un contraataque».

El portavoz indicó que también se espera que la victoria de Ramadi sirva para que fuerzas tribales suníes, que hasta ahora se habían mostrado recelosas del Gobierno central iraquí, integrado por chiíes, se sumen a los esfuerzos para desplazar a los yihadistas.

«Estamos golpeando la cabeza de la serpiente...Aún no la hemos arrancado y aún puede morder», advirtió Warren.