«La medalla es una recompensa a una vida que es muy sacrificada»

Francisco José Fernández es abogado de Alcalá del Río. La abogacía, la docencia, la investigación, la empresa y la administración. Todo esto forma parte de la vida profesional de este alcalareño que acaba de recibir la Medalla de Oro al Mérito Profesional, otorgada por el Consejo General de Relaciones Industriales y Ciencias del Trabajo

12 mar 2016 / 20:21 h - Actualizado: 13 mar 2016 / 10:41 h.
  • Francisco José Fernández ha logrado la Medalla de Oro al Mérito Profesional. / A. C.
    Francisco José Fernández ha logrado la Medalla de Oro al Mérito Profesional. / A. C.

El abogado Francisco José Fernández, vive a caballo entre Sevilla y Alcalá del Río, donde están sus «raíces». Unas raíces que le han hecho volar muy alto pero volver siempre para dejar lo mejor de sí en su tierra. Eso es lo que más le enorgullece de todo su esfuerzo, por el que ha sido merecedor de la Medalla de Oro al Mérito Profesional que otorga el Consejo General de Relaciones Industriales y Ciencias del Trabajo.

A pesar de sus 45 años ya tiene en su haber numerosos reconocimientos y en su currículo rezan proyectos tan importantes «como el metro de Málaga, Torre Sevilla –conocida como Torre Pelli–, el último Plan General de Ordenación Urbana de la ciudad, un proyecto de biomarcadores en Córdoba o el informe para la Confederación de Empresarios de Andalucía sobre innovación en la empresa». Durante años, «bastante joven», fue jefe de contratación en empresas públicas de la Consejería de Obras Públicas, por lo que ha podido derrochar sus «habilidades» por la geografía andaluza. Habla de habilidades porque cree que eso es lo que se demanda en el mercado de trabajo actual. «Ya no sirve la especialización, hay que manejar diferentes campos», por las exigencias de los tiempos que corren. Y eso, junto con una inquietud porque sus alumnos despejen los anhelos de salir al extranjero para triunfar, es lo que intenta transmitir en la Universidad Loyola Andalucía, donde es profesor y director ejecutivo del Máster de Asesoría Jurídica y Empresa.

Aunque considera fundamental viajar para poder conocer qué y cómo hacen en otros países y vivir experiencias en otros lugares, «para luego poder volver e implementar lo aprendido respetando las particularidades de nuestra tierra». «Hay empresas andaluzas muy cotizadas en el extranjero», sentencia. Después de su jornada laboral, encuentra su particular retiro en Alcalá del Río, de donde lo que más le gusta es tener cerca a los amigos de siempre.

«La mezcla tan bonita de generaciones que se encuentran en la calle y el cariño de la gente» sirven de asiento para esa idiosincrasia que le da su pueblo. Asegura tener tiempo, a pesar de sus compromisos profesionales, para llevar una vida personal y familiar equilibrada, algo que considera «fundamental». «Para triunfar en lo profesional hay que hacerlo antes en lo personal y soy lo que soy gracias a mi pueblo», afirma. Por eso agradece a su familia la «comprensión» en momentos de mucha responsabilidad, como la preparación de su tesis doctoral, «cuando llegaba a robarle horas al sueño» para terminarla. Esto es por lo que cuando recibió la llamada en la que le comunicaron la concesión de la medalla se acordó de sus «padres, mujer e hijos», pues fue la recompensa a una vida que es «muy sacrificada».

Francisco José es actualmente socio director de la multinacional INEO en Andalucía, asesora a distintas entidades públicas y privadas, pertenece a consejos asesores como la Fundación Cuidar y Curar, el Foro Innova Universidad Empresa y la mutua Umivale y, además, desde hace cuatro años es el hermano mayor de la hermandad de la Vera Cruz de su localidad. Asegura vivir esta faceta de manera muy íntima y desde el plano de la entrega y el servicio a los demás. «A la hermandad llegan muchas personas que están pasando necesidad y ahí está para ayudarlas», apostilla. De hecho, continúa, «es la única hermandad que tiene una residencia para mayores de la localidad y de la provincia de Sevilla, donde se desarrolla una gran labor social».

No se plantea el futuro lejano, a la pregunta de si le queda algo en el tintero que le gustaría hacer, afirmando «ser feliz» con su profesión. Por eso pretende seguir publicando libros, continuar con la docencia y aportando su experiencia y conocimientos en esa cara de Andalucía por la que nos catalogan de excelencia en el extranjero. «Eso me llena de satisfacción», apostilla. Lo mejor de todo lo que ha vivido hasta ahora para él son todas las personas interesantes con las que se ha encontrado hasta ahora, que le han aportado «mucho personalmente».

La Medalla de Oro se suma a otros galardones como el Premio al Mérito Profesional, del Fórum Europa otorgado en 2014, o el Premio a la Trayectoria profesional de la Federación Andaluza de empresas 2015. Ha ocupado puestos de responsabilidad en compañías como KPMG Abogados, Garrigues&Andersen o Ayesa.