La carrera de Juan Miranda González, natural del aljarafeño pueblo de Olivares, ha sido una concatenación de buenas rachas, objetivos y sueños cumplidos; todo ello fruto de una gran puesta en marcha.
Tras iniciarse en su pueblo natal, fue pescado por la cantera del Real Betis Balompié, donde el lateral izquierdo empezó a destacar, hasta que en 2014 acabó en la Masía culé, disputando incluso varios encuentros con el primer equipo. Tras ello, una breve cesión por Alemania (Schalke 04) y otra a su Betis.
La tónica del joven canterano con Manuel Pellegrini fue tan buena que no dudaron en ficharlo este pasado verano, antes de su incorporación a la Selección Española sub21, de cara a la preparación de los JJ.OO. de Tokyo.
En la anterior campaña 2020/2021, Miranda terminó con 25 partidos y un gol a Osasuna en liga y otro al Mutilvera en la Copa del Rey. Esta temporada lleva 13 partidos, siendo 5 de ellos de Europa League, es decir, lo ha jugado casi todo en la competición del viejo continente, donde también metió un gol al Celtic. Tras la increíble temporada pasada, llegaron algunos premios como estar incluido en el Once de Oro del Fútbol Draft, quedando su compañero Rodri en el equipo de plata. El jugador olivareño también ha recibido el premio del deporte de la ciudad de Sevilla y recientemente el premio Andalucía Joven 2021 por su talento y dedicación.
Pero jugar con la selección ya es un premio en sí mismo, y por ello este año es especialmente reseñable en la carrera de Miranda. El joven sevillano ha debutado dos veces este año: con la selección absoluta y con la selección olímpica. El gol logrado en su único partido disputado con la absoluta (frente a Lituania en el estadio de la Cartuja) se suma al mayor logro del año: la medalla de plata obtenida en Tokyo, tras realizar una destacada participación.
El Real Betis, la Selección Española y hasta la propia FIFA se han hecho eco varias veces de las diabluras del chico de Olivares en los entrenamientos, publicando vídeos de lanzamientos de falta o filigranas varias, y es que la zurda de Miranda cada vez está más cotizada y sus 21 años son garantía de éxito allá donde salga a jugar.