Formación para una vida en libertad

42 reclusos sevillanos finalizan su reinserción sociolaboral tras pasar por el programa ‘Reincorpora’ de la Obra Social La Caixa

25 abr 2017 / 06:01 h - Actualizado: 24 abr 2017 / 23:16 h.
"Formación","Servicios Sociales","Ricardo Gil-Toresano Riego"
  • Foto de familia en la clausura del programa ‘Reincorpora’. / El Correo
    Foto de familia en la clausura del programa ‘Reincorpora’. / El Correo
  • Un momento de la sesión de ayer. / El Correo
    Un momento de la sesión de ayer. / El Correo

A Sergio López y Javier Barragán la vida les ha dado una segunda oportunidad. Después de cumplir condena en los centros penitenciarios de Sevilla y Morón de la Frontera no solo han aprendido un oficio sino que son uno más en las plantillas de sus actuales trabajos en Abades Triana y Carrefour, respectivamente. Y lo han logrado tras su participación en el programa Reincorpora de la Obra Social La Caixa, que en su última edición ha formado en distintos ámbitos a 42 internos de la provincia de Sevilla, de los que 34 se han incorporado al mercado laboral.

«De mis compañeros de Sevilla II –eran 17– todos han acabado colocados, así que nos ha cambiado la vida», afirma orgulloso Sergio mientras destaca los valores que ha interiorizado en este tiempo. Porque, efectivamente, el principal reto de este programa, más allá de conseguir un empleo en los tiempos que corren, es que estos internos puedan «hacer de una vez por todas una vida en libertad», tal y como expresó el director gerente de la entidad estatal de Derecho Público, Trabajo Penitenciario y Formación para el Empleo, José Suárez, presente en la clausura del Reincorpora celebrada este lunes en el CaixaForum.

En el acto también estuvieron presentes el subdelegado del Gobierno en Sevilla, Ricardo Gil-Toresano, y el director territorial de Caixabank en Andalucía Occidental, Rafael Herrador, quienes destacaron la «vida nueva» a la que estos alumnos se enfrentan tras la realización de los cursos. Mantenimiento y jardinería, limpieza, auxiliar en tienda u hostelería, ayudante en taller de automoción, logística y comercialización, dependiente de productos frescos y operaciones básicas de cocina y catering son las especialidades que se han impartido de la mano de las entidades Liberación y Padre Leonardo. Algunos de los internos han participado en dos servicios solidarios vinculados a la formación recibida con el objetivo de trabajar la prevención y sensibilización sobre la vida sin problemas judiciales.

«La formación es lo que os va a diferenciar del resto», recordó al alumnado Gil-Toresano, y aprovechó para hacer un llamamiento a las empresas «para que no tengan prejuicios a la hora de contrataros, pues una vez cumplida la condena tenéis derecho a ser reinsertados plenamente». No en vano, el 74 por ciento de los internos que ha superado con éxito los cursos se ha incorporado a trabajar en empresas del sector en el que se han formado.

Claro que esto no hubiera sido posible sin la voluntad de los reclusos: «Os agradecemos el paso que habéis dado», señaló el director territorial de Caixabank en Andalucía Occidental, «pues si uno quiere tener una vida diferente a la que ha tenido debe estar preparado para aprender cosas que antes no sabía».

Algo que corroboró Sergio. «Para mí todo esto es nuevo, pero lo voy a aprovechar todo lo que pueda. Estoy trabajando en el mejor sitio del mundo y tenéis que ir allí a comer para comprobarlo», dijo entre risas.

La clausura de los cursos, que incluyó una entrega de diplomas, sirvió también para hacer balance de los resultados del programa en Sevilla. Desde su puesta en marcha en 2011, el Reincorpora ha formado a un total de 375 reclusos de la provincia de Sevilla de los cuales el 66 por ciento ha conseguido un trabajo. Cifra que no sería posible sin la inestimable colaboración de las 110 empresas en las que los internos realizan las prácticas tras finalizar la formación. Solo en el año 2016 se produjeron un total de 45 contrataciones laborales en 29 de ese más de centenar de entidades.

Los itinerarios que siguen los reclusos son totalmente personalizados y tutorizados por la figura del técnico Reincorpora, que se encarga del acompañamiento de la persona a lo largo de todo el proceso de integración sociolaboral. Para el presente año, está prevista la intervención de 50 personas y el desarrollo de un proyecto InOut gestionado conjuntamente entre el Centro Penitenciario Sevilla II y el CIS Luis Jiménez de Asúa.