La última absolución de un tribunal del jurado fue en 2012

Solo se han dado 17 absoluciones durante estos 20 años de juicios populares. Durante los últimos tres años se ha condenado a todos los acusados

01 ene 2016 / 19:58 h - Actualizado: 02 ene 2016 / 15:06 h.
"Justicia"

Sentarse en el banquillo de los acusados ante un jurado popular es casi sinónimo de acabar con una condena. Si se logra una absolución es prácticamente un milagro, pues en 20 años tan solo 17 encausados han resultado absueltos. De hecho, desde 2012 no se da una absolución ante un jurado en Sevilla, es decir, ya son tres años consecutivos con un 100 por cien de condenas. Una fama que hace que muchos acusados quieran evitar a toda costa someterse al dictamen de la Justicia popular.

En estas dos décadas, la Oficina del Jurado ha recibido un total de 273 casos, de los que 146 han acabado en juicio y se ha llegado a una conformidad previa, evitando así la vista, según los datos ofrecidos por dicha oficina. En 117 ocasiones se dictó un veredicto de culpabilidad, lo que supone un 87 por ciento de los casos. Más de la mitad de estos asuntos fue por homicidio o asesinato.

En cuanto a las absoluciones, en este tiempo han sido: cuatro por homicidio, dos asesinatos, cuatro por allanamiento de morada, dos por omisión del deber de socorro, otros dos por amenazas, uno por exacciones y otro por malversación. Precisamente, fue por este delito cuando se produjo la última exculpación, que fue en 2012. Es decir, 2013, 2014 y 2015 son tres años en blanco en cuanto absoluciones. También ha habido situaciones en las que la causa se ha acabado archivando porque el acusado ha fallecido antes del juicio.

Durante el año 2015, en la Oficina del Jurado de Sevilla se registraron seis casos, de los que cinco acabaron en juicio, todos con condena. De estos asuntos, cinco fueorn por delitos de asesinato y uno por cohecho. Los próximos juicios previstos, para los que aún no hay fecha, son el que se va a seguir contra la exalcaldesa de Bormujos Ana Hermoso (PP) por un delito de cohecho, ya que supuestamente vendió su voto a cambio de un bolso de Loewe, un juicio que estará presidido por la jueza Mercedes Alaya. El otro pendiente es contra la exconcejal socialista de Los Palacios Rosario Ayala, por supuestamente cargar facturas al erario público de trajes de flamenca que había adquirido para ella.

Normalmente, los juicios con jurados suelen ser muy mediáticos porque o bien son casos de asesinato y homicidios o de políticos juzgados por algún asunto de corrupción. Así, destacan casos como el del celador del Virgen del Rocío, el de la mujer que mató en La Juliana (Bollullos) a su esposo, que era directivo del BBVA, o la que mató y congeló a dos bebés en Pilas, la chica americana cuyo cuerpo fue descuartizado y tirado al río en una maleta o el crimen de la botellona. También se han dado curiosidades, como con el crimen de Marta del Castillo, que llegó a entrar en la Oficina del Jurado, pero después de que Miguel Carcaño confesara una violación fue de nuevo devuelto al juzgado de Instrucción, ya que entonces el caso pasaba a corresponder a un tribunal profesional. En cuanto a casos políticos, destacan Mercasevilla y Camas, o el del exalcalde de La Puebla del Río que gastó más de 6.000 euros con el móvil oficial en llamar a una vecina de la localidad.

Por el contrario, hay delitos que nunca ha juzgado un jurado popular, como el tráfico de influencias o el de infidelidad en la custodia de presos (por la huida de algún recluso). Tampoco se ha juzgado nunca el delito de incendio forestal, pues en los últimos seis años solo se han dado dos casos que se han resuelto con conformidad.