Los polígonos se deshacen de 25 toneladas de basura

Los operarios del Pacas han retirado residuos del PICA, Store y Aeropuerto

Iñaki Alonso @alonsopons /
12 feb 2017 / 09:19 h - Actualizado: 12 feb 2017 / 09:19 h.
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  • Una de las calles del Polígono Store, uno de los lugares donde se ha destinado personal de limpieza. / El Correo
    Una de las calles del Polígono Store, uno de los lugares donde se ha destinado personal de limpieza. / El Correo

La cruz de los parques empresariales, además de la histórica deuda histórica en inversiones –paliada este año con pequeñas obras en viarios–, está en la limpieza. Una tarea que desempeñan a medias entre Lipasam, con la recogida, y los propietarios. En esa tarea de evitar que los polígonos se conviertan en basureros, el Ayuntamiento ha encomendado a parte de los parados contratados con el Plan de Ayuda a la Contratación (Pacas). Los resultados de este trabajo se miden en toneladas: 25 toneladas de residuos retirados por 23 profesionales de los 198 contratados para las labores de limpieza de la ciudad fuera de las habituales de Lipasam.

Sus principales puntos de actuación han sido, por este orden, Carretera Amarilla, Store, Polígono Aeropuerto y Polígono Calonge, donde se habían recogido, hasta el 31 de enero, 25.000 kilos. Así, la primera avanzadilla, formada por 23 personas, tuvo encomendado el arreglo de los viales y zonas terrizas del polígono industrial Carretera Amarilla (PICA). Las tarea se iniciaron el pasado 13 de diciembre y duraron once días. Las tareas se llevaron a cabo por todo el parque, aunque con especial incidencia en la calle de la Industria y en la avenida de Montesierra. De ahí se retiraron 8.660 kilos de residuos y se consumieron 1.700 bolsas de basura.

«Los operarios del Pacas son de gran ayuda en un tema sensible entre los propietarios que siempre ven que hay margen de mejora», admitió el presidente del PICA, Ignacio Pascual de Castro, que recordó que la limpieza es una de las preocupaciones que trasladó al Consistorio en una reunión reciente. En ella, se trasladó el deseo de contar con contenedores de mayor capacidad.

Tras Carretera Amarilla, y tras el parón vacacional de las navidades, se retomaron los trabajos en el Polígono Industrial Aeropuerto (calle Garlopa). Allí permanecieron hasta el 25 de enero, donde se recogieron 12.240 kilogramos. A partir de ese día, se dividió en dos para iniciar los trabajos en el Polígono Store (calle Escarpia), donde continúan unos trabajos que, de momento, se ha saldado con la recogida de casi 4,5 toneladas de basura. Ya en el mes de febrero, este equipo del Pacas destinado a la limpieza de parques empresariales encauzó sus operaciones al Polígono Calonge.

Pero, además de la limpieza en los parques, el personal contratado por el Pacas tenía otros cometidos. Así, entre las actuaciones destacadas por el Gobierno local se encuentra la limpieza del muro de la Macarena, donde unas 20 operarias recogieron, en una sola jornada (15 de diciembre), 1.100 kilos de basura. Además, otro equipo de 22 operarios realizaron el 22 de diciembre trabajos previos a la cabalgata de Reyes Magos, como la limpieza de los Jardines Murillo. En este dispositivo retiraron 1,2 toneladas de residuos. De igual manera, se realizaron labores de recogida de hojas en el paseo de la calle Torneo, a la altura del cambio de agujas.

Pero esto es sólo la punta del iceberg. El equipo dedicado en exclusiva a polígonos es sólo uno de los ocho grupos de trabajo del Pacas, que suman 198 operarios. De estos, cada uno de los seis parques de limpieza viaria dispone de uno, además de otro equipo emplazado a servicios especiales. Entre todos, llevan la friolera de 197.895 kilos de basura recogida desde que empezaron en diciembre, de los cuales el 58,2 por ciento se retiraron en enero.

La asignación de la tercera edición del Pacas asciende a 2,5 millones y las personas contratadas están realizando labores a la categoría de peón, con un tope salarial de 1.070 euros al mes. Los primeros 378 de los 777 empleados del programa, centrado en contrataciones eventuales entre personas en situación de exclusión social o en riesgo de estarlo, comenzaron a trabajar desde primeros de diciembre. El resto comenzará su labor en marzo.