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El alcalde de Sevilla, Juan Espadas, durante el balance de la Feria de 2016. / José Luis Montero
Una nueva jornada para sacar pecho. Al igual que sucedió al término de la Semana Santa, se reunieron ayer todas las personas que han participado con cierta responsabilidad en el dispositivo de seguridad con la salvedad de que, en esta ocasión, fue en el Ayuntamiento y que estaba presente el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, ante el que se levantaron solemnemente todos los presentes y quien solo tuvo palabras de agradecimiento por el «magnífico trabajo profesional y humano».
Una labor que ha permitido que, pese a las «incertidumbres» meteorológicas, se hayan superado las previsiones «con creces». Y que es otro ejemplo del «éxito de coordinación de cada cual y entre el Estado, la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento», dijo orgulloso el regidor hispalense, quien destacó que «aunque hay elementos de mejora, hemos resuelto mejor las incidencias de otros años».
En total, en el dispositivo han intervenido más de 5.000 personas de distintos servicios municipales y de otras administraciones «de forma coordinada y eficaz», «gracias al Cecop, que se confirma como un servicio imprescindible».
Espadas presumió de la labor de prevención realizada durante la Feria, tanto en los comercios y bares de la zona, donde hubo inspecciones la semana anterior, como con los dispositivos ante posibles caso de alcoholemia para evitar accidentes o inspecciones de consumo, teniendo en cuenta que «se han realizado más intervenciones pero han disminuido las incidencias».
Y entonces comenzó el detalle de cifras que respaldan la satisfacción municipal. Se interpusieron 157 denuncias por botellón, un 175 por ciento más. Espadas destacó la actuación conjunta entre Policía Local y Lipasam en la zona de Los Remedios para minimizar las molestias de los vecinos y evitar las concentraciones de jóvenes. Es este consumo incontrolado de alcohol el que preocupa al gobierno municipal. Y es que este año han proliferado la venta de alcohol en mesas de playa en el Real. Se intervinieron 70 puntos en la zona de la calle del Infierno y aledaños, si bien el delegado admitió que es necesario seguir insistiendo en este asunto pues «no solo es que se venda a jóvenes es que las botellas están abiertas y se desconoce qué producto se distribuye».
Pero si hubo una cifra que destacó fue el incremento de los transportes públicos. Desde el sábado de preferia, Tussam transportó a 935.347 usuarios, lo que supone un 4,6 por ciento más de viajeros. Este cifra asciende a 1.166.553 personas si se tiene en cuenta la lanzadera del Charco de la Pava, lo que equivaldría a un 3,2 por ciento más que el año pasado. En el caso del Metro el aumento fue del 3,1 por ciento sus viajeros, hasta los 838.257 usuarios.
Ante todo este panorama de éxitos, el alcalde se marcó varias metas para la Feria de 2017. Reforzar el espectáculo que este año se ha llevado a cabo en la portada el día del Alumbrao para potenciarlo, al igual que los fuegos artificiales, de cara a las televisiones y al turismo, centrándose en impulsar las sevillanas «como elemento consustancial a la fiesta, algo que se ha olvidado en los últimos años». Así como incidir en la apertura de la caseta municipal, que este año ha acogido hasta ocho recepciones de distintos colectivos al día, pues «debe ser el escaparate de la ciudad que no puede estar más tiempo cerrado que abierto, sino que debe reforzar la proyección pública de la ciudad».