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Los ritos del agua

Eva García Sáenz de Urturi entrega una novela apasionante, la segunda de una trilogía que está funcionando muy bien entre los lectores. Novela negra española en estado puro

20 may 2017 / 12:35 h - Actualizado: 17 may 2017 / 20:35 h.
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  • Portada de ‘Los ritos del agua’. / El Correo
    Portada de ‘Los ritos del agua’. / El Correo

Decía el poeta alemán Schiller: «No es la carne y la sangre, sino el corazón, lo que nos hace padres e hijos». Una evidencia que a menudo vemos reflejada en nuestro día a día y que hoy nos sirve para introducir el nuevo trabajo de Eva García Sáenz de Urturi, el último fenómeno de las letras españolas.

Aún sorprendidos por la fuerza con la que irrumpió el pasado año en las listas de ventas con El silencio de la ciudad blanca —un apasionante thriller que alcanzó las 17 ediciones y que ya tiene su adaptación cinematográfica en marcha—, la autora vitoriana nos invita a sumergirnos en el segundo título de la que ya muchos consideran la trilogía de moda en España. Y es que Eva García parece haber reinventado la fórmula del éxito. No en vano, su saga de los longevos se convirtió en un fenómeno viral en las redes sociales, llegando a superar en ventas a los best sellers tradicionales, lo que llamó la atención de la editorial Planeta.

Con Los ritos del agua, la escritora nos confirma las buenas sensaciones dejadas con el primer título de la serie. Si en aquel asistíamos a un recorrido apasionante por su Vitoria natal —en el que no faltaban los mejores ingredientes de la novela negra—, en esta ocasión nos trasladamos a los sugestivos paisajes del Cantábrico.

Unai López de Ayala —alias Kraken—, el joven inspector experto en perfiles criminales protagonista de El silencio de la ciudad blanca, se ve envuelto de nuevo en un caso de una complejidad extrema. Su primera novia, Ana Belén Liaño, aparece asesinada en un paraje natural. La mujer estaba embarazada y fue ejecutada según un ritual de hace 2600 años: quemada, colgada y sumergida en un caldero de la Edad del Bronce. Mientras trata de poner en orden su vida, Kraken deberá detener a un asesino que imita los Ritos del Agua en lugares sagrados del País Vasco y Cantabria y cuyas víctimas son personas que esperan un hijo.

Al igual que en la primera parte (de la que ya se han vendido más de 100.000 copias), la autora de Pasaje a Tahití nos atrapa desde el inicio con una historia compleja haciendo uso de cuantos recursos tiene a su alcance; estos son un argumento hipnótico, un ritmo endiablado y un lenguaje llano y directo que recuerda a las mejores series de televisión. Si a esto le sumamos el gusto por la arqueología y los mitos celtíberos, el producto no puede resultar más atractivo. Asimismo, y siguiendo la línea de su predecesora, Los ritos del agua vuelve a incidir en la importancia de la familia como eje vertebrador de la historia —como ya hiciera con gran éxito Dolores Redondo en su alabada Trilogía del Baztán—, centrándose en esta ocasión en las relaciones paterno-filiales.

Nada escapa a la improvisación en un proyecto hecho a la medida del lector actual: desde los capítulos cortos a la narración en primera persona, Sáenz de Urturi nos obliga a estrujarnos la mente y a participar activamente en la búsqueda del culpable, demostrando que al género negro aún le queda cuerda para rato.

Calificación: Muy bueno.

Tipo de lectura: Amena, envolvente.

Tipo de lector: Amantes de la novela negra.

¿Dónde puede leerse?: No hay sitio malo.