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Algunos de los participantes de la rueda de prensa de ayer, entre ellos Raimundo Amador y Kiko Veneno, posan en el CAAC. / Manuel Gómez
Al mundo de la música se le pueden reprochar muchas cosas, pero no que no sea solidario. Y menos cuando el llamamiento es en favor de uno de esos artistas especialmente queridos, que han dejado una huella profunda en varios generaciones de colegas aunque haga tiempo que no suben a un escenario. Rafael Amador, Rafaelillo para los íntimos y los fans más fieles, atraviesa un período de salud delicada y necesitaba ayuda. Gente cercana decidió que un festival podría ser la fórmula ideal para recaudar los fondos necesarios, y empezó a mover la convocatoria. Pero ni los más optimistas podían imaginar que la respuesta sería tan espectacular. Si no se tratara de gente pacífica, podría decirse que ha habido tortas para entrar en el cartel. Nadie quiere quedarse fuera.
La presentación del programa tuvo lugar ayer en la sede del Centro Andaluz de Arte Contemporáneo (CAAC), en el mismo Monasterio de la Cartuja donde se celebrará el evento el próximo día 12 de septiembre. Como insólito moderador, Raimundo Amador, hermano de Rafael y cómplice en mil aventuras musicales, quien agradeció la avalancha de respuestas afirmativas –y aun de ofrecimientos para actuar– en nombre de toda la familia. A continuación Pepe Bao, del grupo O’Funkillo, aseguró que el propósito de su banda es hacer «un reconocimiento al arte que ha tenido siempre Rafael y todo lo que ha aportado a la música, al flamenco, al rock y a la mezcla de ambos. Es un crack, un genio, y estamos ahí para apoyarle».
«Cuando nos llamó Raimundo no tuvimos ninguna duda en decir que sí, no solo porque sean geniales, sino también porque son bellísimas personas y se lo merecen todo», apuntó Diego Ruiz, del grupo Storm, mientras que la cantaora Carmelilla Montoya, vinculada también a los Amador por lazos familiares, aseguró que «para mí es un honor que se acuerden de mí para este homenaje. A toda persona que está caída se le ayuda a levantarse, pero es que además se trata de un gran artista», apuntó.
Por su parte, Kiko Veneno, también veterano compadre de Rafael, quiso expresar su gratitud hacia el músico, «un sentimiento que viene incluso antes del deseo de ayudarle. Fue un músico que cogió el testigo de Smash y Storm, de ídolos nuestros de entonces como Triana o Lole y Manuel. Lo conocí con pantalones cortos y a los pocos años estaba haciendo rock and roll y aquella rondeña genial. Es único», apostilló el cantante.