Otro Villamarín, otro Betis (2-1)

LA CRÓNICA. El equipo verdiblanco se sobrepone a un tempranero autogol de Camarasa e impone su fútbol para remontar y batir al Celta con sendos cabezazos de Sergio León y Feddal. Prometedora actuación del marroquí, Javi García o Guardado, entre otros, sin olvidar el liderazgo de Joaquín

25 ago 2017 / 21:54 h - Actualizado: 26 ago 2017 / 17:17 h.
"Real Betis"
  • Sergio León celebra su primer gol oficial en el Betis besando el escudo / Manuel Gómez
    Sergio León celebra su primer gol oficial en el Betis besando el escudo / Manuel Gómez

El Betis celebró el bautizo oficial del nuevo Villamarín como merecía la ocasión: con un buen partido, una gran remontada y una justa victoria ante el Celta. Al calor de ese bellísimo estadio que ha quedado tras un año de obras, la hinchada deseaba con ansia el nacimiento de un nuevo Betis... y se encontró precisamente eso. Quique Setién y sus futbolistas, ocho de ellos debutantes en estas lides de Heliópolis, dieron una muy buena impresión a pesar de ese tempranero autogol de Camarasa, que enseñó lo peor del sistema defensivo verdiblanco. A continuación, sin embargo, surgió la mejor cara de un equipo que, en principio, no tiene nada que ver con el de las últimas temporadas. La principal prueba es su capacidad para sobreponerse a ese mazazo del 0-1, pero hay otros indicios, como el fútbol que, ahora sí, esbozó durante muchos minutos del encuentro. El Betis ganó a base de fútbol, no de pelotazos, ni de corazón, ni de alguna genialidad aislada. Ganó con mucha cabeza, nunca mejor dicho. Ganó como equipo. Y ganó, en definitiva, de acuerdo con el manual de su entrenador, aunque por supuesto le queda un largo trecho para perfeccionar esa atractiva propuesta del míster.

Lo especial de la noche no se tradujo en un Betis sobreactuado ni acelerado, aunque el conjunto verdiblanco sí se plantó en el partido con cierto ímpetu y una primera internada de Sergio León en el área y una falta cercana que Durmisi remató al resucitado Gol Sur. Pero de ir a por el Celta de forma descarada, nada. La cautela tenía una buena base: cada vez que los vigueses superaban la primera línea de presión de su rival y el balón rondaba el área de influencia de Aspas, el peligro estaba casi asegurado. Por ese lado, el izquierdo de la defensa bética, llegaron un primer remate del delantero vigués que Durmisi despejó in extremis y acto seguido, en el saque de esquina, el 0-1. Fue un córner pésimamente defendido por el Betis: Mandi se quedó pensando en las musarañas y perdió de vista a Maxi Gómez, que cabeceó con fuerza pero sin colocación hasta que Camarasa metió también la testa y envió el balón a la red. Dos autogoles del Betis en dos jornadas de Liga. Ver para creer.

El equipo de Setién tardó diez minutos en reponerse del estado de shock. Un primer centro de Camarasa al que no llegó Joaquín viró el rumbo del choque y estableció las coordenadas que interesaban al Betis, que empezó entonces a practicar ese fútbol de toque y paciencia que preconiza su responsable. Guiado por Guardado, el equipo verdiblanco amagó con varios centros peligrosos, la mayoría desde la derecha, hasta que uno de ellos, curiosamente desde la izquierda aunque con la firma del mexicano, sí halló rematador: Sergio León. La mejor manera de inaugurar esa portería del nuevo Gol Sur: un gol importante a cargo de un bético de toda la vida.

La igualada, lógicamente, sentó muy bien al Betis y a su convencimiento de que la teoría que propone Setién puede ser muy válida en la práctica. El equipo siguió tocando y tocando, cada vez con más fluidez e incluso profundidad, y el envite mantuvo esa tonalidad verdiblanca hasta el descanso. En el 37’, de hecho, casi llegó el 2-1, pero Roncaglia evitó que Sergio León rematase a gol tras una gran jugada de Joaquín y Durmisi. Y en el 42’, contra de Camarasa que culminó Sergio León con un derechazo desviado. El Celta, pendiente sólo de lo que pudiese hacer Aspas, apenas asustó a Adán en un chut lejano de Wass.

El principio de la segunda parte alteró un poco el desarrollo del encuentro. El Betis perdió el balón en beneficio del Celta, pero esta vez sí juntó sus líneas y cerró cualquier posibilidad de que Adán se sintiese amenazado. Fueron minutos intrascendentes y aburridos que llegaron hasta más allá del cuarto de hora. A partir de ese momento reapareció el Betis mandón, aunque no el profundo. Les costó a los verdiblancos volver a acercarse a Sergio, aunque lo intentaron sobre la seguridad que transmitieron tanto los cuatro defensas como Javi García, mucho más asentado en esa posición clave por delante de los centrales.

Una vez que el Betis recuperó el control, el Villamarín volvió a disfrutar con su fútbol. Que a estas alturas de Liga no es para tirar cohetes ni considerarlo aspirante a nada, pero visto lo visto y sufrido lo sufrido en los últimos años... El caso es que Sergio ya tuvo que hacer un paradón en el 69’ tras un magnífico centro de Joaquín y un cabezazo de Guardado y tres minutos después se internó Sergio León pero Tello no se atrevió a rematar con la izquierda. Lo importante es que la senda había vuelto a reabrirse y por ella entró el Betis hasta el fondo. En el 76’, tras otro impresionante centro de Joaquín que Sergio desvió lo justo para que no marcase Sergio León, Feddal halló el 2-1 en el consiguiente saque de esquina, de nuevo con asistencia de Guardado.

De ahí al final, el Betis se pertrechó cerca de su portero y no mostró ninguna fisura. Lo más peligroso que hizo el Celta, su único remate, fue uno de Lobotka que acabó manso en los guantes de Adán. La defensa hizo su trabajo, Javi García fue un bastión en todo el pasillo perpendicular al área y el orden general acabó de completar la primera gran fiesta del nuevo Villamarín. Ya era hora de que los béticos regresaran a sus casas con una sonrisa en la cara...

REAL BETIS: Adán; Barragán, Mandi, Feddal, Durmisi; Javi García; Francis (Tello, m. 65), Guardado, Camarasa, Joaquín (Narváez, m. 84); y Sergio León (Sanabria, m. 79).

RC CELTA: Sergio; Hugo Mallo, Roncaglia (Cabral, m. 74), Sergi Gómez (Lobotka, m. 80), Jonny; Radoja, Jozabed; Wass (Pablo Hernández, m. 64), Iago Aspas, Sisto; y Maxi Gómez.

Goles: 0-1, m. 9: Camarasa, en propia meta. 1-1, m. 31: Sergio León. 2-1, m. 76: Feddal.

Árbitro: De Burgos Bengoetxea (Comité Vasco). Amonestó a Feddal (64’), Jozabed (68’), Mandi (83’) y Radoja (95’).

Incidencias: partido de la 2ª jornada de Liga, disputado en el estadio Benito Villamarín ante 45.761 espectadores.