El verano ha llegado con fuerza y ya son varias las olas de calor que estamos sufriendo tanto en Andalucía como en España y otras ciudades de Europa. Para sobrevivir a estas fuertes temperaturas, los expertos recomiendan beber mucha agua, no salir en las horas más fuertes de calor o llevar ropa clara, entre otras medidas. No obstante, también hay que tener en cuenta que, bebidas como el gazpacho, pueden ayudarnos a refrescarnos y llenarnos de energía y vitaminas.
Y es que, el gazpacho es una fuente de vitaminas y minerales. Algunos lo denominan como la bebida isotónica natural por su gran contenido en agua y sales minerales, los cuales nos ayudan a mantener hidratado nuestro organismo y evitar la fatiga. Además, este posee propiedades antioxidantes gracias al licopeno del tomate y la vitamina C, que participan en la ralentización del envejecimiento de la piel.
Asimismo, esta bebida típica andaluza colabora en mantener fuerte nuestras defensas, ya que, el ajo actuaría como antibiótico natural que ayuda a aumentar las defensas del organismo contra bacterias y virus.
Sin embargo, el gazpacho ha ido versionándose a lo largo de los años. Aunque para muchos es un “pecado mortal” crear nuevos tipos de gazpacho que incluyen ingredientes “no tradicionales” de la receta, estas nuevas versiones nos permiten innovar en la cocina y probar nuevos sabores que nos aporten aún más propiedades beneficiosas para la salud.
Gazpacho de melón
Para esta receta del gazpacho solo habría que sustituir el tomate por el melón. Es decir, los ingredientes a utilizar serían el melón, ajo, pimiento verde, pepino, pan, aceite y sal. Finalmente, podríamos coronarlo con jamón y tomarlo como una sopa fría.
El melón nos aporta agua, vitamina A, B, C y E, ácido fólico, fibra y minerales como el calcio, hierro y potasio. Su alto contenido en colágeno lo convierte en el mejor aliado para nuestra piel, ya que participa activamente en la recuperación de la piel dañada (por ejemplo, cuando nos quemamos en la playa o en la piscina) y la cicatrización de las heridas.
Gazpacho de sandia
En esta versión del gazpacho, una de las más conocidas dentro de las nuevas variantes de la receta tradicional, no hay que quitar el tomate. Por tanto, los ingredientes a utilizar serían tomates maduros, sandía, ajo, pimiento verde italiano, sal, vinagre de vino blanco, aceite y pan, este último como opcional.
La sandia es una fruta con un alto contenido en agua y nos proporciona muy pocas calorías. Además, aporta a nuestro organismo vitamina C y E, calcio, hierro, magnesio y potasio.
Gazpacho de fresas
Al igual que el anterior, el gazpacho de fresas mantiene el uso del tomate. Para recrear esta receta harían falta fresas, pepino, tomates, pimiento verde italiano, aceite, vinagre de vino blanco o Jerez, pan, sal y agua al gusto para ajustar el espesor.
Las fresas poseen un alto contenido en hierro y magnesio, aunque también aportan potasio, calcio, fósforo, manganeso, cobre y silicio, por lo que los expertos la recomiendan para tratamientos de déficits nutricionales. De igual forma, también es una gran fuente de vitamina C, K y ácido fólico.