Este martes 13 de septiembre se festeja la existencia de uno de los dulces más irresistibles: el chocolate. El Día Internacional del Chocolate se celebra coincidiendo con la fecha en la que nació Roald Dahl, en 1916, autor de Charlie y la Fábrica de Chocolate, y con el nacimiento en 1957 del estadounidense Milton Hershey, fundador de The Hershey Chocolate Company, una de las empresas más importantes del sector del chocolate.
Por suerte, el chocolate no solo es un placer para los 5 sentidos, sino que su consumo también nos aporta grandes beneficios para la salud. No obstante, para poder obtener todas las propiedades de este alimento hay que escoger un buen chocolate, ya que sus beneficios aumentarán según el % de sólidos de cacao y de la cantidad de ingredientes que contenga, como fruta o frutos secos.
Si el chocolate contiene una mayor cantidad de sólidos de cacao, es decir, pasta de cacao, también contará con más energía, grasas, grasas saturadas, fibra, magnesio, cafeína, flavonoides, triptófano y anandamina. Por el contrario, contendrá menos azúcares y calcio. Por su parte, el chocolate blanco o con leche cuenta con más cantidad de azúcar y calcio, y con menos cantidad de proteínas, grasas saturadas, fibra y energía.
Según la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación (SEDCA) el chocolate negro es el que nos aportará mayor cantidad de nutrientes y propiedades para la salud. El chocolate nos ayuda a reducir la presión arterial, mejorar nuestro estado de ánimo y evitar la depresión, mejorar la piel y prevenir el envejecimiento, mejorar la memoria y reducir el riesgo de infarto, entre otras grandes propiedades.
Protege el corazón
“En la composición del chocolate destaca la elevada cantidad de polifenoles (principalmente flavonoides), en mayor concentración que en otros alimentos como vino tinto, té verde o algunas frutas (manzana). Dietas ricas en flavonoides han sido inversamente correlacionadas con riesgo cardiovascular”, explican investigadores del Instituto de Ciencia y Tecnología de Alimentos y Nutrición y de la Facultad de Farmacia de la Universidad Complutense de Madrid. Es por ello por lo que, un consumo diario de chocolate rico en cacao es una buena elección para reducir, al menos parcialmente, el riesgo cardiovascular.
Cuida nuestra piel
La alta concentración de antioxidantes (flavonoides) que posee el chocolate negro lo convierten en uno de los alimentos ideales para prevenir el envejecimiento prematuro de la piel. Asimismo, su consumo nos proporcionaría una piel más suave y a la vez más resistente a los rayos UVA.
Mejora la memoria
Hace unos años, un grupo de investigadores de la Universidad de L´Aquila, en Italia, estudiaron la relación entre el consumo de chocolate negro y la disminución del riesgo de sufrir deterioros cognitivos o demencia. Los flavonoides del chocolate aumentan el volumen sanguíneo cerebral, lo que ayuda a reducir los daños sufridos por el envejecimiento y el deterioro de la memoria relacionado con la edad.
Igualmente, otros estudios también relacionan al chocolate negro con una mejora del rendimiento cognitivo, ya que el aumento de flujo de sangre al cerebro también nos haría sentir más despiertos y “ágiles”, lo que facilitaría el proceso de aprendizaje.