«Crearemos un portal de transparencia para que los hermanos conozcan las cuentas»

Con el lema ‘Juntos decidimos, juntos construimos’, este comercial prejubilado opta a relevar a Pepe Moreno al frente de Los Gitanos apostando por la transparencia en la gestión y las nuevas tecnologías como vía de comunicación con los hermanos

24 ene 2018 / 21:47 h - Actualizado: 25 ene 2018 / 08:22 h.
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Costalero del Señor de la Salud hasta 2010, y desde entonces nazareno, Antonio Moreno Santaella (Sevilla, 1955), casado, padre de tres hijos y abuelo de seis nietos, se mide el domingo, día 28, en las urnas con José María Flores, para convertirse en hermano mayor de Los Gitanos tras más una década de experiencia en diversas juntas de gobierno.

—¿Por qué se presenta a hermano mayor?

—Por la cantidad de hermanos que me lo han pedido a raíz de los acontecimientos que está pasando esta hermandad. Nosotros queremos dar claridad, transparencia y recuperar a tantos hermanos que se están retirando por los problemas que se están dando últimamente.

—¿Se refiere al desfase en las cuentas?

—El problema es, como ha salido en los medios y nuestro hermano mayor, Pepe Moreno, nos informó en un cabildo extraordinario, todo el dinero que ha tenido que aportar, cerca de 26.000 euros, por la mala gestión económica desde la mayordomía de la hermandad. Además, en ese cabildo, el mayordomo, José María Flores, nos informó de que había otros 8.000 euros de los que no encontraba factura. Él se comprometió con los hermanos a que en un plazo prudencial nos informaría. Llevamos dos meses y varios días esperando y hasta hoy, nada. Confío en que la explicación de este dinero llegue hoy en el cabildo de cuentas. Sobre todo, después del sacrificio que ha hecho Pepe.

—¿A qué corresponden esos 8.000 euros?

—Lo que puedo explicar es que lo que han visto algunos hermanos hace cinco o seis días: una fotocopia del recibo que la propia fiscal primero de la hermandad no reconoce como pago. Es un recibo de 5.000 euros del arquitecto del columbario. De los otros 3.000 euros no sabe nada. A lo mejor en el cabildo nos sorprende.

—¿Ese dinero está repuesto?

—Yo no lo dudo, pero si un hermano mayor ha tenido que aportar esa cantidad de su patrimonio particular, después de toda una vida trabajando, que, por cierto, esos 8.000 euros no figuran en el libro mayor como ingreso, lo menos que nos merecemos, y el primero, Pepe, es que se justifiquen.

—¿Qué le parece que precisamente José María Flores sea su contrincante en estas elecciones?

—Eso está en la conciencia de cada uno. Los hermanos votantes son los que tienen que valorar si su mandato ha sido bueno o malo. Yo me reservo mi opinión.

—Tras estos dos mandatos de Pepe Moreno, que parecían un remanso de paz, lo que trasciende de nuevo son estas luchas internas que se reflejan en dos candidaturas.

—No hay luchas internas. Lo único que hay son muchos hermanos divididos porque están sorprendidos de esta actuación. Todos sabemos que Pepe es una bellísima persona, que ha entregado su corazón allí y creo que no está bien correspondido con su junta. Hay muchos hermanos que no están satisfechos con esta explicación del mayordomo y lo que nosotros pedimos es transparencia, que nos explique dónde ha ido su dinero. Pero no es la primera vez que se presentan dos candidaturas: que los hermanos elijan.

—¿Qué plantea en su candidatura para atajar estos problemas?

—El candidato a mayordomo lleva un equipo de jóvenes de la hermandad y, en la página web, va a informar mensualmente a los hermanos, mediante una clave, las cuentas. Y para todos los gastos que se necesiten y superen los 1.000 euros, se va a pedir tres presupuestos. Tendremos un portal de transparencia, que se podrá consultar mensualmente, igual que a final de año se pondrán las cuentas del cierre y se sometan a la aprobación de los hermanos en el cabildo general.

—¿Le duele que la hermandad salga a la luz por estas cosas?

—Muchísimo, tendría que salir por otras cosas. Ahí está la acción social que está haciendo la hermandad con los conventos del barrio, con los comedores sociales, en el Vacie. Una gran labor que queremos incrementar. De hecho, nosotros queremos crear una asociación o una fundación para poder recabar más dinero y poder invertirlo en esta acción social.

¿Cree que Pepe Moreno ha hecho una buena labor?

—Buena, no, buenísima. Ha creado escuela. Y el único lunar no lo ha hecho él, que lo único que ha querido ha sido solventarlo. Demasiado es que ha salido al frente, solo. Y humilde, no hacía falta que lo sacara a la calle. Los demás no lo sabíamos hasta el cabildo general.

—¿Perdonaría a José María Flores si reconoce el error?

—Sí. Le hemos dado infinidad de oportunidades. Le hemos ofrecido de todo. Llevamos más de dos meses esperando una explicación a la que se comprometió en un cabildo general.

—¿Cómo están las cuentas de la hermandad?

—No lo sabemos hasta que se presenten las cuentas nuevas [esta tarde está convocado el cabildo general de cuentas]. Sólo sabemos que hay un impago de 300.000 euros, por la casa hermandad. Pero con fe y esperanza vamos a salir adelante.

—¿Cuál es su principal proyecto?

—La acción social. Caridad. Pero llevamos también el proyecto del cortafuego, algo que ya propuse hace años, para darle seguridad a las imágenes. También queremos conseguir la titularidad definitiva sobre los terrenos del templo y de la casa hermandad, un asunto que dejamos en manos de Carlos de Paz, que lo ha estado llevando hasta ahora.

—¿Qué le pareció que Carlos de Paz presentara su candidatura a hermano mayor y la tuviera que retirar?

—Tendrá sus motivos. Con él iban algunos de los dimisionarios de la junta de gobierno de Pepe, pero debe ser que él ha visto que no era su momento y se retiró para que no había esa lucha interna en la hermandad. Yo confío plenamente en él.

—¿Cómo es su candidatura?

—Hay veteranía y juventud y gitanos y no gitanos. De hecho, gitanos sólo somos cuatro. Los no gitanos tienen el mismo derecho que nosotros y son mayoría.

—¿Le gusta cómo queda la Madrugá?

—Sí me gusta. Sólo pido que me respeten el tiempo de paso, que no entremos con las claritas del día. Si cada hermandad cumple su horario, perfecto. Estamos encantados y agradecidos con el sacrificio que hace la Macarena tirando por la Alfalfa.

—Es complicado cumplir los horarios.

—Si ponemos voluntad, no. Hace unos años, cuando llovió, los cumplimos todos. Nosotros lo cumplimos siempre. Aunque nos achaquen que si cuatro o cinco marchas, Los Gitanos no dejan retraso. Si tienes un tiempo de paso, cúmplelo. Si una cofradía quiere cumplir su tiempo, lo cumple. Que cumplan todas.

—Quiere recuperar el barrio para la cofradía...

—Es que nuestra cofradía es barrio. Nosotros añoramos San Román. Nos rehicimos en San Román, allí perdimos nuestros titulares, allí volvimos a nacer. Aunque tengamos nuestro santuario, somos de la parroquia. Añoramos esa calle Enladrillada, Peñuelas, Socorro... esos hermanos antiguos del barrio, que, aunque se acercan al santuario, quieren ver la cofradía por su barrio.

—¿Se ha notado en las arcas de la hermandad la ausencia de la duquesa de Alba?

—Creo que no. La duquesa hizo la labor en su momento, nos dejó todo saneado y la hermandad, con los recursos que tiene ahora, puede tirar para adelante. Ahora estamos como un recién casado: con una hipoteca a 25 años que tendrá que ir asumiendo la hermandad. No pensamos en grandes proyectos, en faldones... vamos a pensar en pagar lo que tenemos y lo demás, para labor social.

—¿Qué le pareció la pintada en la casa hermandad?

—En cuanto me enteré, llamé a José María Flores, le ofrecí mi apoyo total y que sacáramos juntos un comunicado de prensa rechazando esta pintada. Él me manifestó que no quería darle importancia, lo respeté y nosotros sacamos el comunicado al mediodía, repudiando esto. De estos temas hay que olvidarse.

—¿Cómo va a garantizar la seguridad de las imágenes?

—Hermanos ingenieros están estudiando la fórmula. El Señor siempre va a estar como está pero la idea es que su pedestal tenga como un ascensor para que, en caso de que pase algo, baje y quede protegido. El camarín de la Virgen se cerraría como el del Cachorro.

—¿Seguirá el Señor en besapiés?

—Sí. Ahora solo hay una valla pero se puede pasar y la idea es que siga así.

—También quería facilitar el acceso al columbario.

—Aprovechando las obras de la casa hermandad, queremos hacer un acceso directo, desde la planta sótano al columbario. Tal como está ahora mismo, con una trampilla y una escalera de caracol, es imposible que pueda entrar una persona mayor. Es una de las ideas que nos han mandado los hermanos para la configuración del programa.

—¿Cómo llenará la casa hermandad?

—Faltan los muebles, pero lo importante es llenarla de hermanos, que la vida de hermandad está ahora mismo de capa caída.

—¿Albergará el museo?

—Sí, queremos además que se incorpore en el circuito turístico de la visita al Palacio de Dueñas.

—Y para la antigua casa hermandad, ¿qué tiene pensado?

—Ahora mismo está como aval de la hipoteca. Pero lo decidirán los hermanos en un cabildo que convocaremos en su momento.