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Foto. Rafa Peña
Los hermanos del Museo, en cabildo general extraordinario celebrado en su Capilla de la Expiración durante la noche de este pasado martes 7 de marzo, no respaldan con el mínimo de los dos tercios que exigen las reglas corporativas la propuesta de la junta de gobierno que preside Juan María Toro Guillén como hermano mayor de recuperar definitivamente las manos entrelazadas originales para María Santísima de las Aguas, obra, como la propia mascarilla de la dolorosa, de Cristóbal Ramos en 1772. Si allá por el último mes de junio salió adelante la propuesta sólo para la salida extraordinaria del pasado sábado 15 de octubre de 2022, ahora no se ha refrendado.
Foto: Javier Montaño
A la hora de esta negativa, parece ser que ha pesado especialmente una matización de la idea planteada por la mesa de oficiales de la cofradía decana del Lunes Santo, y es que ésta pudiese decidir si en el besamano del Domingo de Pasión y en el triduo decembrino en honor a la Virgen, la imagen podía recuperar, puntualmente y por acuerdo del cabildo de oficiales, las manos separadas de Antonio Infantes del año 1922, opción que a muchos cofrades de esta corporación no convencía. Se registraron 237 votos, emitidos de manera nominal y secreta, de los que 90 no han apoyado la iniciativa, mientras que 145 sí votaron a favor, registrándose 2 en blanco. Por lo tanto, no se lograron los dos tercios a favor por un margen de trece votos favorables.
El templo registró un lleno absoluto, ocupándose incluso el coro y sus dependencias anexas, tal y como aconteciese en el ya referido cabildo de junio pasado. En primer lugar, además, se celebró el cabildo ordinario de salida, al que siguió éste, donde intervinieron diversos hermanos para exponer sus opiniones y argumentos. De hecho, la votación comenzó en torno a las once y media de la noche, prologándose durante unos cuarenta minutos, pues el escrutinio se inició sobre las doce y cuarto de la noche y finalizó casi a la una menos veinte de la madrugada.