La única procesión magna del año 2023 será la del Santo Entierro Grande el Sábado Santo 8 de abril. Lo ha dejado muy claro la autoridad eclesiástica a través de la misiva que firma el delegado diocesano de hermandades y cofradías, el padre Marcelino Manzano, con fecha del pasado viernes 14 de octubre y dirigida a Andrés Martín, hermano mayor de la Hermandad de la Divina Pastora de Santa Marina, y a toda la junta de oficiales de la misma, tras la propuesta realizada, de manera totalmente unilateral, desde la corporación letífica de la calle Amparo de organizar un evento similar a gran escala, porque lo era, con las devociones gloriosas de la ciudad.
La Archidiócesis de Sevilla ha calificado dicha iniciativa, no obstante, como una propuesta loable, pero siendo muy preferible postergarla para otro año en el que sea más oportuno el desarollo de su celebración, puesto que el Santo Entierro Magno tiene el suficiente peso y la adecuada consistencia para conmemorar, por sí solo, el 775 aniversario de la restauración del culto católico en nuestra urbe por parte del Santo Rey Fernando III, hecho que se conmemorará a lo largo del año venidero.
La primitiva corporación pastoreña ha emitido este martes 18 de octubre un comunicado en el que expone todos estos detalles, resaltando que el hermano mayor fue recibido en audiencia por el sacerdote Manzano, quien le comunica en persona el resultado del estudio de aquella propuesta, si bien la hermandad letífica aguarda que, efectivamente, esta magna procesión gloriosa vuelva a ser considerada en un futuro no lejano, quién sabe si en 2025, que será año santo jubilar.
Igualmente, estos pastoreños invitan a las demás hermandades hispalenses a que solemnicen la efeméride fernandina, ya que la Hermandad de la Divina Pastora de Santa Marina ve frustrado su sueño de la procesión magna de Glorias, si bien ésta no ha prosperado tampoco porque ni las propias corporaciones la han apoyado, ni al Consejo se le ha dado su sitio en todo este asunto. De hecho, los hermanos mayores de Glorias tanteados estaban dispuestos, primeramente, a escuchar el plan ideado, aunque al final lo acabaron conociendo por la prensa.