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Rosalía. / EFE-Mariscal
Según dijo en una entrevista en Europa Press, el cineasta aragonés Carlos Saura quiere hacer una película sobre Rosalía y la evolución del flamenco. No se sabe si una cinta para contar la vida de la cantante catalana o tratar al flamenco a través de ella y su “revolución”. En otros tiempos era normal que afamados directores se ocuparan del flamenco aprovechando fenómenos como Juan Valderrama, Joselito, Lola Flores, Carmen Amaya, Rocío Dúrcal o Rocío Jurado. Algunas de estas películas funcionaron bien en taquilla y hoy son joyas del cine español, y otras quedaron en el olvido por no ser nada del otro jueves. Saura ha hecho ya historia con películas de enorme calidad con Gades o Cristina Hoyos, y Flamenco, desde luego, es una maravilla, al menos en mi opinión.
Su fascinación por Rosalía es bien conocida, de la que piensa que está “modernizando el flamenco”, algo que él llevaba mucho tiempo queriéndolo hacer. “Hay que innovar en el flamenco”, ha dicho. Él mismo ha innovado desde su cine en películas como Bodas de sangre (1981), Carmen (1983) o Flamenco (1995), tres obras imprescindibles. A lo mejor hace la película con Rosalía y nos descubre la importancia flamenca de esta cantante de enorme éxito, que algunos no acabamos de entender. Hace años pude hablar con él sobre este arte en Ronda, en la presentación de Flamenco, y entendí su visión del arte jondo, desde luego muy alejada de los tópicos y las teorías de los rancios flamencólogos.
Hace dos o tres años leí que quería hacer una película sobre el origen hindú del flamenco, pero parece que no encontró financiación en Bollywood. Carlos Saura es de los que se tragaron el cuento de que el flamenco venía de la India y quiso irse a Bombay a averiguar cómo pudieron cantar los antepasados de El Planeta y El Fillo. Tenía más cerca Cádiz, Jerez o Triana, pero se le metió en la cabeza lo de irse a la India a buscar la seguiriya de Frasco el Colorao o los romances portuenses. Al final no sé qué pasó con aquella peregrina idea.
Con el proyecto de Rosalía quizá esté buscando un pelotazo económico, después de lo mal que le fue con Flamenco.