Intrusos

Iker Jiménez, Lorenzo Fernández y las imitaciones del misterio

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04 ago 2022 / 04:00 h - Actualizado: 04 ago 2022 / 04:00 h.
"Intrusos"
  • Iker Jiménez, Lorenzo Fernández y las imitaciones del misterio

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Seguramente muchos de los que les gustan el misterio y lo desconocido ven algunos de los programas de televisión que se hacen al respecto en este país. Programas que pueden ser temáticos o variados y que, desde luego, provocan mil reacciones en el espectador, desde incredulidad, sorpresa, miedo, escepticismo, diversión, depende de cada uno.

Hay un referente cierto en todo esto del misterio en España que es Iker Jiménez y su «Cuarto Milenio», años en parrilla defendiendo, con su buen hacer delante de la cámara, lo que más le gusta: el misterio. Y es algo que le honra pues es fiel a sus ideas y a sus principios más allá de las modas de cada época. Críticas leo muchas en foros y en redes sociales pero, lo cierto, es que muchos lo imitan y quieren parecerse a él (que es más difícil) o a lo que hace (que es igualmente complejo).

Cuando no se consigue pues surge la mala baba y el deporte nacional de este país, la crítica envidiosa y destructiva, hace acto de presencia.

Hay algo que no se le puede quitar y que son años defendiendo una profesión y años persiguiendo el misterio, un estilo muy propio, poner sobre el tapiz aquello que le gusta y que puede poner de moda -léase el caso de su admirado Félix Rodríguez de la Fuente, fascinación que compartimos- y la capacidad de tratar de variar el contenido del programa para dotarlo de temas nuevos, diferentes, que podrán gustar más al espectador que sigue una línea, pero que, al menos, se agradece el intento y los resultados (qué luego serán más alabados o no).

Nada es fruto de la casualidad ni del azar, tras un programa de esas características hay mucho trabajo y mucha producción, muchas personas trabajando por «arrimar el hombro» -que nadie lea una referencia a Pedro Sánchez que eso si que es un misterio- y al final, semana a semana, con reporteros, grafistas, iluminadores, producción y, por supuesto, su presentación y dirección, surge un milagro semanal que ver en televisión. Hay mucho trabajo tras todo eso y nunca se debe minusvalorar ese esfuerzo.

¿Defensa numantina del programa? Eso querrán leer unos y a otros les extrañará más, pero lo cierto es que es un ejercicio de justicia y que sólo el que trabaja en un medio de comunicación sabe lo difícil que es sacar adelante un programa durante temporadas, o el temor por cada renovación, o el tener que prescindir de colaboradores o de recortes en los presupuestos, sólo esa persona lo sabe y sabe lo que es y lo que implica.

Sí, defensa de un programa que se ha convertido en un referente y uno modelo para muchos como en su día lo hiciera mi querido Fernando Jiménez del Oso y que hoy es Historia de la Televisión y de la divulgación parapsicológica, aunque a mí me guste más llamarlo divulgación de fenómenos inexplicables. De por sí ya es Historia en la Televisión y es lo único que, en ocasiones, se puede «echar uno a la boca» de misterio. Por todo eso habría que entonar un ¡Aleluya!

Evidentemente lo agradece el que ya está cansado de los alienígenas ancestrales de Tsoukalos, que en todos sitios ve extraterrestres, que lo único que hace es restar credibilidad a estos temas en muchas ocasiones.

Honrosas excepciones como en DMAX «Extraterrestres«, el enorme esfuerzo y despliegue de mi buen amigo Lorenzo Fernández Bueno y que logra reverdecer los viejos laureles del fenómeno OVNI en España, contando casos espectaculares con testigos y protagonistas de esos hechos, un programa de «pico y pala», de carretera, con la percha y la profesionalidad que es habitual en él y que no deja indiferente a nadie.

Iker Jiménez, Lorenzo Fernández y las imitaciones del misterio


Siempre he pensado que Lorenzo es el prototipo de aventurero del misterio, de curioso, de narrador de lo imposible con su poderosa vez (a él «le llama poderosamente la atención» todo) y que hace que todo forme un cúmulo de circunstancias que envuelve y mete en una historia con el saber de aquel que tiene las ideas muy claras.

Yo he vivido algunas jornadas de producción y rodaje junto a él y se del esfuerzo titánico que supone hacer una serie de estas características, de las horas que se roban al sueño, del alejarse de la familia. De compatibilizar lo imposible y al final se logre el resultado apetecido, aunque siempre se apelará al sentido perfeccionista y se dirá aquello de «se puede mejorar» aunque a mí me parezca insuperable.

Especial mención a Josep Guijarro, uno de los sabios del misterio, de aquellos que pueden pasar desapercibido conscientemente pero que esconde datos y testimonios que valen su peso en oro. Director de la mítica revista Karma-7 en su día (ya desaparecida) contar con él es contar con un caballero del misterio amén de con una de las personas que más inteligencia demuestra en todos sus comentarios sobre fenómenos paranormales y, en especial, sobre el fenómeno OVNI.

Este formato es bastante más complejo de imitar, exige de muchos kilómetros, gran producción y la imitación siempre sería odiosa y «cantosa».

No me olvido de mi mismo, desde 7tv Andalucía intento llevar –con la mayor humildad- el mundo del misterio a todos los rincones que sintonizan con «Andalucía Paranormal» desde su TDT o en internet. Mucho sufrimiento, mucha producción y mucho trabajo para hacer algo digno delante de las cámaras, al menos que sea interesante y aborde temas en profundidad.

No somos una gran cadena con un gran presupuesto y, por eso, es complejo establecer analogías y paralelismos en las que siempre, siempre, saldría perdiendo pero... ¿Saben? Se hace con ilusión y con dignidad, podrá salir peor o mejor, gustar más o menos pero, desde luego, nadie podrá quitar el empeño de levantarme en cada caída y volverlo a intentar, «el que la lleva la entiende».

Hoy día veo muchos canales de Youtube y muchos son los imitadores de Iker Jiménez o de Lorenzo Fernández y, salvando honrosas excepciones (pocas), todo se repite en exceso. Cada cual debe buscar su propio camino y su propio estilo allá donde se debe trabajar mucho esperando poco o nada a cambio y, créanme, de eso se mucho.

Es el mejor consejo: «Busquen su propio camino, su propio estilo, no imiten», cuando se imita se corre el riesgo de ser una mala copia de lo que se está imitando y eso nunca, nunca, es bueno. ¿No creen lo mismo?